Biblia Todo Logo
অনলাইন বাইবেল

- বিজ্ঞাপন -





Ezequiel 8:6 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

6 Entonces Dios me dijo: «Fíjate en las acciones tan repugnantes que cometen los israelitas. Eso hace que yo me aleje de mi templo. Pero todavía vas a ver cosas peores».

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক


অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

6 Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿no ves lo que estos hacen, las grandes abominaciones que la casa de Israel hace aquí para alejarme de mi santuario? Pero vuélvete aún, y verás abominaciones mayores.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Nueva Traducción Viviente

6 «Hijo de hombre —me dijo—, ¿ves lo que hacen? ¿Ves los pecados detestables que cometen los israelitas para sacarme de mi templo? ¡Pero ven y verás pecados aún más detestables que estos!».

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Católica (Latinoamericana)

6 Me dijo: '¿Hijo de hombre, has visto todos los horrores que comete aquí la casa de Israel para echarme de mi Santuario? Pero todavía verás algo peor aún.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

La Biblia Textual 3a Edicion

6 Me dijo entonces: Hijo de hombre, ¿has visto lo que ellos hacen? Grandes son las abominaciones que la casa de Israel hace aquí para alejarme de mi Santuario. Pero aún verás abominaciones mayores.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক

Biblia Serafín de Ausejo 1975

6 Me dijo: 'Hijo de hombre. ¡Ya ves lo que hacen éstos, las grandes abominaciones que comete aquí la casa de Israel para alejarme de mi santuario! Pero todavía verás otras abominaciones mayores'.

অধ্যায়টো চাওক কপি কৰক




Ezequiel 8:6
32 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

»Juro que acabaré con todos los habitantes de Jerusalén. No les tendré compasión. Yo soy el Dios de Israel. Puesto que no respetaron mi templo, sino que adoraron a sus ídolos odiosos y siguieron con su maldad,


Entonces Dios me dijo: «Entra y verás las acciones tan repugnantes que allí se cometen».


Los cuatro seres con apariencia extraña extendieron sus alas y se llevaron sus ruedas. Entonces el gran resplandor de Dios, que estaba encima de ellos,


De allí me llevó a la entrada norte de su templo. Allí vi sentadas unas mujeres que lloraban por el dios Tamuz.


Para colmo, ¡en mi propio templo colocaron sus asquerosos ídolos! ¡Eso no lo puedo aceptar!


Por eso, así como destruí el santuario de Siló, también destruiré el templo de Jerusalén, y esta ciudad será objeto de burla y de insulto”».


»Dios mismo lo afirma: “Los profetas y los sacerdotes son los primeros en hacer el mal; ¡hasta en el templo cometen terribles maldades!


»Ustedes, que son descendientes de Judá, han cometido el peor de los males: Han llenado de pecado este templo, que es mi casa, al poner allí sus ídolos asquerosos. Les juro que así es.


¡Mira lo que pasa en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén!


Cuando Josías era rey, Dios me dijo: «Jeremías, ¿te has fijado en lo que ha hecho mi pueblo Israel? Se ha comportado como una esposa infiel. En los cerros altos y bajo la sombra de cualquier árbol adora a dioses extraños.


¡Ahora estoy casi en la desgracia ante toda la comunidad!»


Por eso Dios abandonó Siló, que era donde vivía en este mundo;


Dios me dijo: «Jeremías, tus enemigos están tramando hacerte daño».


Dios me llevó luego a la entrada del patio del templo, y en la pared vi un agujero.


»A los israelitas les dirás de mi parte: “Dejen ya de hacer lo malo, abandonen a sus ídolos y vuelvan a obedecerme.


maltrata a los pobres y les roba a los demás; no le devuelve a su deudor lo que recibió en garantía de pago; adora a dioses falsos y comete pecados repugnantes,


Entonces el hombre me preguntó: «¿Te fijaste bien en todo esto?» Cuando regresamos a la orilla del río,


»Pero un día me buscarán; y llevarán como ofrenda sus vacas y sus ovejas, pero no podrán encontrarme. ¡Yo los abandonaré!


y les dijo: «Escúchenme con atención: Es urgente que ustedes se preparen para honrar al Dios de sus antepasados y que preparen también su templo. Saquen de allí todo lo que a Dios no le agrada.


Pero esto no es todo; todavía vas a ver cosas peores».


comenzó a alejarse de Jerusalén, y se detuvo sobre el cerro que está al este de la ciudad.


Tampoco volverán a construir sus palacios junto a mi templo, separados solo por una pared. Sus infidelidades me ofenden, pues yo soy un Dios diferente. Tanto me hicieron enojar, que por eso los destruí.


আমাক অনুসৰণ কৰক:

বিজ্ঞাপন


বিজ্ঞাপন