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Deuteronomio 18:18 - Biblia Traducción en Lenguaje Actual

18 »Dios elegirá ese profeta de entre el pueblo. Será uno de los nuestros, y hará lo mismo que ahora hago; es decir, les comunicará todo lo que Dios quiera decirles.

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অধিক সংস্কৰণ

Biblia Reina Valera 1960

18 Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

18 Levantaré un profeta como tú de entre sus hermanos israelitas. Pondré mis palabras en su boca, y él dirá al pueblo todo lo que yo le ordene.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

18 Yo haré que se levante de en medio de sus hermanos un profeta, lo mismo que hice contigo. Yo pondré mis palabras en su boca y él les dirá todo lo que yo mande.

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La Biblia Textual 3a Edicion

18 Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú, y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que Yo le ordene.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

18 Yo les suscitaré de en medio de sus hermanos un profeta como tú; pondré mis palabras en su boca y él les comunicará todo lo que yo le mande.

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Deuteronomio 18:18
40 পৰস্পৰ সংযোগসমূহ  

Por eso les dijo: —Ustedes sabrán quién es en realidad el Hijo del hombre cuando me cuelguen de una cruz. También sabrán que no hago nada por mi propia cuenta, sino que solo digo lo que mi Padre me ha enseñado.


»Un día, nuestro Dios escogerá de entre ustedes a un hombre, que será profeta como yo. Cuando estábamos en el monte Horeb, ustedes me dijeron que no querían escuchar la voz de Dios, ni ver el fuego desde donde Dios hablaba, pues no querían morir. Pues bien, nuestro Dios les dará el profeta que pidieron, y ustedes deberán obedecerlo en todo.


La mujer le dijo: —Yo sé que va a venir el Mesías, a quien también llamamos el Cristo. Cuando él venga, nos explicará todas las cosas.


Jesús preguntó: —¿Qué ha pasado? Ellos le respondieron: —¡Lo que le han hecho a Jesús, el profeta de Nazaret! Para Dios y para la gente, Jesús hablaba y actuaba con mucho poder.


Luego Felipe fue a buscar a Natanael, y le dijo: —Hemos encontrado a aquel de quien Moisés escribió en la Biblia, y del que también hablan los profetas. Es Jesús de Nazaret, el hijo de José.


El Dios todopoderoso ha dicho: «¡Miren al mensajero de mi pacto! Ustedes esperan su llegada, y él ya se ha puesto en marcha. Lo estoy enviando delante de mí, para que me prepare el camino. Cuando menos lo esperen, yo entraré en mi templo. Yo soy el Dios todopoderoso, a quien ustedes buscan. »Mi mensajero ya viene. Pero, cuando llegue, nadie va a poder resistir su presencia. ¡Ese día nadie va a poder mantenerse en pie! Mi mensajero es como el fuego que purifica los metales; es como el jabón que limpia la mugre.


»Yo les dije lo que deben decir, y los protegeré con mi poder. Yo he extendido los cielos y afirmado la tierra, y ahora digo: “Habitantes de Jerusalén, ¡ustedes son mi pueblo!”»


porque les he dado el mensaje que me diste, y ellos lo han aceptado. Saben que tú me enviaste, y lo han creído.


Solo hay un Dios, y solo hay uno que puede ponernos en paz con Dios: Jesucristo, el hombre.


Los envío a dar tu mensaje a la gente de este mundo, así como tú me enviaste a mí.


Ya no los llamo sirvientes, porque un sirviente no sabe lo que hace su jefe. Los llamo amigos, porque les he contado todo lo que me enseñó mi Padre.


Dios ha hecho un juramento, y lo cumplirá: «Tú eres sacerdote para siempre, como lo fue Melquisedec».


Los amenaza diciendo: «Ya elegí al rey que gobernará desde el monte Sión, que es mi montaña santa».


Por eso Jesús nos asegura que ahora tenemos con Dios un pacto mejor.


El fiel servidor dijo: «Dios me enseñó a consolar a los que están afligidos y cansados. Me despierta todas las mañanas, para que reciba sus enseñanzas como todo buen discípulo.


Y ustedes y sus líderes reconocieron a Dios como su rey».


Entonces Moisés le pidió a Dios que sanara a María,


Yo serví de intermediario entre Dios y ustedes para comunicarles el mensaje de Dios, pues todos tenían miedo del fuego. Por eso no subieron al monte. Allí Dios dijo:


Y ellos volvieron a preguntarle: —¿Eres Elías? Juan les respondió: —No; no soy Elías. Pero los sacerdotes y sus acompañantes insistieron: —¿Eres tú el profeta que Dios iba a enviar? —No —dijo Juan.


El que me rechaza y no obedece mis enseñanzas, será condenado por esas mismas enseñanzas cuando llegue el fin.


»Uno de esos profetas fue Moisés, quien dijo: “Dios elegirá a uno de nuestro pueblo, para que sea un profeta como yo. Ustedes harán todo lo que él les diga.


Y fue Moisés mismo quien les anunció a los israelitas: “Dios elegirá a uno de nuestro pueblo, para que sea un profeta como yo.”


Anda, ponte en marcha a Egipto, que yo te ayudaré a que hables bien, y te enseñaré lo que debes decir.


Tú dile a Aarón todo lo que te he mandado decir, para que él se lo diga al pueblo por ti. De ese modo, Aarón hablará en tu lugar, así como tú hablas en lugar mío. Yo, por mi parte, les ayudaré a hablar y les enseñaré lo que deben hacer.


Dios, entonces, le dio a Balaam este mensaje: —Regresa a donde está Balac y repite el mensaje que te he dado.


Nunca más hubo en Israel un profeta como Moisés, que hablara con Dios cara a cara.


Dios continuó diciendo: «Préstame atención, pueblo mío; voy a dar mi enseñanza, y mi justicia servirá de guía para las naciones.


De entre los hijos de ustedes, elegí a algunos como profetas y a otros los aparté como nazireos. ¡Díganme ustedes si miento! Les juro que así fue.


Dios se le apareció a Balaam, y le dio este mensaje: «Regresa a donde está Balac, y repite el mensaje que te he dado».


14 (15) Pero ahora los israelitas han hecho enojar a Dios, por eso los castigará. ¡Les hará pagar sus crímenes y toda la maldad que han cometido!


আমাক অনুসৰণ কৰক:

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