8 Mas vino a mí palabra de Jehová, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has hecho grandes guerras; no edificarás casa a mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí.
8 pero el Señor me dijo: “Tú has matado a muchos hombres en las batallas que has peleado. Puesto que has derramado tanta sangre ante mis ojos, no serás tú el que edifique un templo para honrar mi nombre;
8 Pero me fue dirigida la palabra de Yavé que me dijo: Tú has derramado mucha sangre y has hecho grandes guerras; no podrás edificar la Casa a mi nombre porque has derramado mucha sangre delante de mí.
8 pero la palabra de YHVH vino contra mí, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has hecho grandes guerras, por tanto, no edificarás Casa a mi Nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí.
8 Pero me fue dirigida la palabra de Yahveh, que me dijo: 'Tú has derramado mucha sangre y has hecho grandes guerras. Por eso no puedes tú edificar un templo a mi nombre, porque has derramado mucha sangre en tierra delante de mí.
»Nuestro Dios decidió que de la tribu de Judá saldría un rey que gobernaría por siempre en Israel. Por eso eligió a mi familia, y de entre todos mis hermanos me eligió a mí. A pesar de esto, Dios no me permitió construirle el templo, porque yo había participado en muchas guerras y había matado a mucha gente.
3 (17) «Tú sabes que mi padre no pudo construir un templo para adorar a nuestro Dios, porque había estado en muchas guerras, hasta que Dios venció a sus enemigos.