(El lino y la cebada fueron destruidos, porque la cebada estaba madura y el lino estaba floreciendo.
Rut 2:23 - Versión Biblia Libre Así que Rut se quedó con las trabajadoras de Booz recogiendo el grano hasta el final de la cosecha de cebada, y luego hasta el final de la cosecha de trigo. Vivió con su suegra todo el tiempo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Estuvo, pues, junto con las criadas de Booz espigando, hasta que se acabó la siega de la cebada y la del trigo; y vivía con su suegra. Biblia Nueva Traducción Viviente De modo que Rut trabajó junto a las mujeres en los campos de Booz y recogió grano con ellas hasta el final de la cosecha de cebada. Luego siguió trabajando con ellas durante la cosecha de trigo, a comienzos del verano. Y todo ese tiempo vivió con su suegra. Biblia Católica (Latinoamericana) Rut continuó, pues, recogiendo espigas al lado de los trabajadores de Booz hasta que terminó la siega de la cebada y del trigo. Por lo demás, no se separó de su suegra. La Biblia Textual 3a Edicion Así pues, tuvo estrecha compañía con las criadas de Booz, y espigó hasta que se acabó la siega de la cebada y la siega del trigo; pero habitaba con su suegra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se juntó, pues, ella con las criadas de Booz para espigar, hasta que se terminó la siega de la cebada y la del trigo. Y seguía viviendo con su suegra. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Estuvo, pues, junto con las criadas de Boaz espigando, hasta que la siega de las cebadas y la de los trigos fue acabada; y habitó con su suegra. |
(El lino y la cebada fueron destruidos, porque la cebada estaba madura y el lino estaba floreciendo.
Un hijo sabio acepta la disciplina de su padre, pero el burlador no escuchará la corrección.
Ser amigo de sabios te hará sabio; pero ser amigo de tontos te traerá problemas.
Mientras tanto Pedro estaba abajo en el patio. Y una de las criadas del sumo sacerdote pasaba por allí,
Cuenta siete semanas a partir de la fecha en que comiences la cosecha de granos.
Así regresó Noemí de Moab con Rut, la moabita, su nuera. Llegaron a Belén al comienzo de la cosecha de cebada.
“Eso está bien, hija mía”, le dijo Noemí a Rut. “Quédate con sus trabajadoras. No vayas a otros campos donde podrían molestarte”.
Un tiempo más tarde, Noemí le dijo a Rut: “Hija mía, ¿no crees que debería encontrarte un marido y un buen hogar?