Sus dirigentes son rebeldes, amigos de ladrones. A todos les gustan los sobornos y quieren recibir sobornos. No defienden los derechos de los huérfanos, y se niegan a ayudar a las viudas.
Números 22:7 - Versión Biblia Libre Entonces los líderes moabitas y madianitas partieron, llevándose el pago de la adivinación con ellos. Cuando llegaron, le dieron a Balaam el mensaje de Balac. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Fueron los ancianos de Moab y los ancianos de Madián con las dádivas de adivinación en su mano, y llegaron a Balaam y le dijeron las palabras de Balac. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces los mensajeros de Balac y los ancianos de Moab y de Madián, partieron con el dinero para pagarle a Balaam a fin de que maldijera a Israel. Llegaron donde estaba Balaam y le transmitieron el mensaje de Balac. Biblia Católica (Latinoamericana) Los ancianos de Moab partieron pues junto con los de Madián, con las manos llenas de regalos para el adivino, y llegaron a la casa de Balaam. Cuando le transmitieron las palabras de Balac, La Biblia Textual 3a Edicion Fueron, pues, los ancianos de Moab y los ancianos de Madián con la paga para el adivino en sus manos,° y llegaron a Balaam, y le hablaron las palabras de Balac. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se pusieron en camino los ancianos de Moab y de Madián, con la paga para el adivino en sus manos y, llegados a Balaán, le refirieron las palabras de Balac. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y fueron los ancianos de Moab, y los ancianos de Madián, con las dádivas de adivinación en su mano, y llegaron a Balaam, y le dijeron las palabras de Balac. |
Sus dirigentes son rebeldes, amigos de ladrones. A todos les gustan los sobornos y quieren recibir sobornos. No defienden los derechos de los huérfanos, y se niegan a ayudar a las viudas.
Son perros codiciosos que nunca están satisfechos. Son perros pastores que no conocen su trabajo. Todos van por su cuenta, cada uno mirando por sí mismo.
Me han deshonrado por unos puñados de cebada y unas migajas de pan. Mintiéndole a mi pueblo que cree en justedes, han matado a quienes no debían morir y han dejado vivir a otros que no debían vivir.
“El rey de Babilonia está parado en la bifurcación del camino donde se encuentran los dos caminos buscando una señal profética: echa suertes con flechas, pide consejo a los ídolos y examina el hígado de los animales sacrificados.
Sus líderes juzgan por soborno y sus sacerdotes predican según el precio pagado. Aún así se apoyan en el Señor y dicen: “¿Acaso no está el Señor aquí con nosotros? ¡Nada malo puede sucedernos!”
“Pasen la noche y les haré saber la respuesta que me da el Señor”, les dijo Balaam. Así que los líderes moabitas se quedaron allí con Balaam.
No se puede lanzar ningún hechizo contra Jacob; no se puede usar ninguna magia contra Israel. La gente hablará de Jacob e Israel, diciendo: ‘¡Qué cosas tan asombrosas ha hecho Dios por ellos!’
Cuando Balaam vio que el Señor quería bendecir a Israel, eligió no usar la adivinación como lo había hecho anteriormente. En su lugar se volvió hacia el desierto,
Estas personas no sirven a Cristo nuestro Señor sino a sus propios apetitos, y con su forma de hablar lisonjera y palabras agradables engañan las mentes de las personas desprevenidas.
Toda su habladuría debe parar. Pues ellos causan inestabilidad en las familias, enseñando cosas que no son correctas, por interés de ganar dinero.
Al mismo tiempo, los israelitas mataron a Balaam, hijo de Beor, el adivino, junto con los demás que fueron sacrificados.
Han abandonado el camino recto y se han descarriado, siguiendo el camino de Balaam, el hijo de Beor, a quien le gustaba recibir pago por hacer lo malo.
¡Cuán grande problema tienen! Pues han seguido el camino de Caín. Así como Balaam y su engaño, ellos se han dejado llevar por el afán de lucro. Como la rebelión de Coré, se han destruido a sí mismos.