Después que los despidió a todos, subió a la montaña para orar. Llegó la noche y él estaba allí solo.
Lucas 9:18 - Versión Biblia Libre En otra ocasión, cuando Jesús estaba orando en privado solamente con sus discípulos, les preguntó: “Toda esta multitud de personas, ¿quién dicen que soy?” Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Aconteció que mientras Jesús oraba aparte, estaban con él los discípulos; y les preguntó, diciendo: ¿Quién dice la gente que soy yo? Biblia Nueva Traducción Viviente Cierto día, Jesús se alejó de las multitudes para orar a solas. Solo estaban con él sus discípulos, y les preguntó: —¿Quién dice la gente que soy? Biblia Católica (Latinoamericana) Un día Jesús se había apartado un poco para orar, pero sus discípulos estaban con él. Entonces les preguntó: 'Según el parecer de la gente, ¿quién soy yo?' La Biblia Textual 3a Edicion Aconteció que estando orando a solas, los discípulos estaban con Él, y les preguntó, diciendo: ¿Quién dicen las gentes que soy Yo? Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y aconteció que mientras Él oraba aparte, estaban con Él los discípulos; y les preguntó, diciendo: ¿Quién dice la gente que soy yo? |
Después que los despidió a todos, subió a la montaña para orar. Llegó la noche y él estaba allí solo.
Entonces Jesús se fue con sus discípulos a un lugar llamado Getsemaní. Les dijo: “Siéntense aquí mientras yo voy allá a orar”.
Un día, Jesús estaba orando en cierto lugar. Y cuando terminó de orar, uno de sus discípulos le pidió: “Señor, por favor enséñanos a orar, así como Juan enseñó a sus discípulos”.
Aconteció que después de que todos habían sido bautizados, Jesús también se bautizó. Y mientras oraba, se abrió el cielo,
Un día, poco tiempo después, Jesús subió a una montaña para orar. Allí se quedó toda la noche, orando a Dios.
“Algunos dicen que eres Juan el Bautista, otros dicen que Elías, y todavía otros dicen que eres uno de los antiguos profetas que resucitó de entre los muertos”, respondieron ellos.
Aproximadamente ocho días después de haberles dicho esto, Jesús llevó consigo a Pedro, Juan y Santiago y subió a una montaña para orar.
Mientras oraba, la apariencia de su rostro cambió, y su ropa se volvió blanca, tanto que deslumbraba a la vista.