Se tendió sobre el muchacho tres veces y clamó al Señor: “¡Señor Dios mío, por favor, haz que la vida de este muchacho vuelva a él!”
Lucas 7:14 - Versión Biblia Libre Jesús se dirigió hacia el ataúd, y los portadores del féretro se detuvieron. Jesús dijo: “Joven, a ti te digo, levántate”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate. Biblia Nueva Traducción Viviente Luego se acercó al ataúd y lo tocó y los que cargaban el ataúd se detuvieron. «Joven —dijo Jesús—, te digo, levántate». Biblia Católica (Latinoamericana) Después se acercó y tocó el féretro. Los que lo llevaban se detuvieron. Dijo Jesús entonces: 'Joven, yo te lo mando, levántate. La Biblia Textual 3a Edicion Y acercándose, agarró° el féretro, de manera que los que lo llevaban se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti te digo: ¡Levántate! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y llegándose al féretro, lo tocó. Los que lo llevaban, se pararon. Entonces dijo: '¡Joven! Yo te lo mando: levántate'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban, se detuvieron. Y dijo: Joven, a ti digo: Levántate. |
Se tendió sobre el muchacho tres veces y clamó al Señor: “¡Señor Dios mío, por favor, haz que la vida de este muchacho vuelva a él!”
El Señor respondió al clamor de Elías. La vida del muchacho volvió a él, y vivió.
así los seres humanos se acuestan y no vuelven a levantarse. NO despertarán de su sueño hasta que los cielos dejen de existir.
¿Volverán a vivir los muertos? Entonces tendría esperanza durante todo mi tiempo de angustia hasta que llegue mi liberación.
Porque él habló, y el mundo vino a la existencia; dio la orden, y fue creado.
Pero los que murieron en ti, Señor, vivirán. Sus cuerpos resucitarán. Despiértense y canten de alegría, ustedes que duermen en el polvo, porque el rocío que reciben es como el rocío de la mañana que da vida a los que están en la tumba.
Luego sostuvo la mano de la niña y dijo: “Talitha koum”, que quiere decir: “Pequeña niña, ¡levántate!”
Cuando el Señor la vio se llenó de compasión por ella. “No llores”, le dijo.
El hombre que estaba muerto se incorporó y comenzó a hablar, y Jesús lo entregó de regreso a su madre.
Jesús dijo: “Yo soy la resurrección y la vida. Aquellos que creen en mí, vivirán aunque mueran.
Porque así como el Padre da vida a los que resucita de la muerte, del mismo modo el Hijo también da vida a los que Él quiere.
“Les digo la verdad: Se acerca el tempo—de hecho, ya está aquí—cuando los muertos escucharán la voz del Hijo de Dios; y los que le escuchen, vivirán.
Como dice la Escritura: “Yo te he hecho el padre de muchas naciones”. Porque en presencia de Dios, Abraham creyó en el Dios que hace resucitar a los muertos y trajo a la existencia lo que no existía antes.
Es incluso vergonzoso hablar de las cosas que tales personas hacen en secreto,