Porque el Señor guarda a los que siguen el camino del bien, pero el camino de los malvados conduce a la muerte.
Lucas 13:27 - Versión Biblia Libre Y él responderá: ‘Les aseguro que no los conozco ni sé de dónde vienen. ¡Váyanse de aquí, hacedores del mal!’ Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero os dirá: Os digo que no sé de dónde sois; apartaos de mí todos vosotros, hacedores de maldad. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces él responderá: “Les digo que no sé quiénes son ni de dónde vienen. Aléjense de mí, todos ustedes que hacen maldad”. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero él les dirá de nuevo: No sé de dónde son ustedes. ¡Aléjense de mí todos los malhechores! La Biblia Textual 3a Edicion Pero Él os dirá:° No sé de dónde sois. ¡Apartaos de mí todos los hacedores de iniquidad!° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero él os repetirá: 'No sé de dónde sois; alejaos de mí, todos los fautores de injusticia '. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Él dirá: Os digo que no os conozco de dónde seáis; apartaos de mí todos vosotros, obradores de maldad. |
Porque el Señor guarda a los que siguen el camino del bien, pero el camino de los malvados conduce a la muerte.
Trabajo cada día para silenciar a los malvados de la tierra, para librar a la ciudad del Señor de todos los que hacen mal.
Déjenme en paz, hombres malvados. Déjenme seguir los mandamientos de mi Dios.
Mas, en cuanto a los que se desvían para seguir sus propios caminos, Dios los llevará lejos donde están los otros que hacen el mal. ¡Que haya paz en Israel!
No me lleves con los malvados, con aquellos que hacen el mal. Ellos aparentan amabilidad a sus vecinos, pero conspiran el mal en sus corazones.
Tú destruirás a los mentirosos. El Señor aborrece a los sanguinarios y engañadores.
Déjenme en paz, pueblo que hace el mal. Porque el Señor ha escuchado mi llanto.
Incluso si lograsen concebir hijos, yo me encargaré de que no sobrevivan. ¡Grande es el desastre que vendrá sobre ti cuando yo me aleje!
“También dirá a los de su izquierda: ‘¡apártense de mi, ustedes malditos, vayan al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles!
Cuando el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, ustedes estarán afuera tocando, y diciendo: ‘Señor, por favor, ábrenos la puerta’. Pero él les responderá: ‘No los conozco, ni sé de dónde vienen’.
Pero ahora han llegado a conocer a Dios, o mejor aún, han llegado a ser conocidos por Dios. ¿Cómo pueden volver, entonces, a esas reglas inútiles y sin valor? ¿Quieren ser esclavos de esas reglas nuevamente?
Pero el fundamento sólido y fiel de Dios se mantiene firme, con esta inscripción: “El Señor conoce a los que son suyos”, y “Todo el que invoque el nombre del Señor está apartado de todo mal”.