En su miseria, pidió ayuda al Señor Dios, arrepentido de su arrogancia ante el Dios de sus antepasados.
Levítico 26:43 - Versión Biblia Libre Porque la tierra quedará vacía para ellos, y disfrutará de sus sábados siendo abandonada. Pagarán por sus pecados, porque rechazaron mis reglas y regulaciones. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero la tierra será abandonada por ellos, y gozará sus días de reposo, estando desierta a causa de ellos; y entonces se someterán al castigo de sus iniquidades; por cuanto menospreciaron mis ordenanzas, y su alma tuvo fastidio de mis estatutos. Biblia Nueva Traducción Viviente Pues la tierra tendrá que ser abandonada para que goce de sus años de descanso mientras quede desolada. Al fin el pueblo pagará por sus pecados, pues continuamente ha rechazado mis ordenanzas y despreciado mis decretos. Biblia Católica (Latinoamericana) Así, pues, la tierra será abandonada por ellos para que goce sus descansos sabáticos mientras quede desolada y ellos estén lejos; ellos también pagarán su maldad, porque desecharon mis mandamientos y se cansaron de mis preceptos. La Biblia Textual 3a Edicion Porque la tierra habrá quedado desocupada de ellos, y habrá gozado sus días de reposo mientras estaba en desolación sin ellos, y ellos habrán aceptado el castigo de su iniquidad, por haber rechazado mis ordenanzas y su alma aborrecido mis estatutos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero antes tendrán que abandonar la tierra, a fin de que ella se desquite de sus sábados y se quede yerma durante su ausencia. Y ellos expiarán su falta, por haber menospreciado mis mandamientos y por haber sentido su alma fastidio de mis preceptos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y la tierra será abandonada por ellos, y disfrutará sus sábados, estando desolada a causa de ellos; entonces se someterán al castigo de sus iniquidades; por cuanto menospreciaron mis decretos, y el alma de ellos tuvo fastidio de mis estatutos. |
En su miseria, pidió ayuda al Señor Dios, arrepentido de su arrogancia ante el Dios de sus antepasados.
Así que para cumplir la profecía del Señor dada por medio de Jeremías, la tierra disfrutó de sus sábados como descanso durante todo el tiempo que estuvo desolada, guardando el sábado hasta que se cumplieron setenta años.
Mira qué feliz es la persona a la que Dios corrige, así que no desprecies la disciplina del Todopoderoso.
Antes estuve sufriendo, mientras vagaba lejos de ti, pero ahora hago tu voluntad.
El sufrimiento por el que pasé fue bueno para mi, porque pude meditar en lo que has dicho.
Señor, yo sé que decides con rectitud. Tú me derribaste para ayudarme porque eres fiel.
Señor, cuando sufrimos acudimos a ti, derramando nuestras oraciones como susurros mientras nos disciplinabas.
Cuando volví a ti me arrepentí, y una vez que comprendí, me sujeté la cabeza con tristeza. Me avergoncé y me sonrojé, avergonzado por lo que había hecho cuando era joven”.
Estabas dispuesto a castigarnos, y tenías razón al hacer todo lo que has hecho, porque no te escuchamos.
si rechazas mis leyes, odias mis reglamentos y te niegas a seguir mis mandamientos y, por consiguiente, rompes mi acuerdo,
Destruiré sus lugares altos de adoración, destrozaré sus altares de incienso, y apilaré sus cadáveres sobre lo que queda de sus ídolos, que tampoco tienen vida alguna. Los despreciaré de verdad.
Por eso tomé medidas contra ellos y los exilié en los países de sus enemigos. Sin embargo, si humildemente abandonan su actitud obstinada y aceptan el castigo por sus pecados,
Ustedes odian a todos aquellos que confrontan la justicia y aborrecen a los que hablan con honestidad.
En un mes despedí a tres pastores. Mi paciencia con ellos se agotó, y ellos también me odiaron.
El mundo no tiene razones para odiarlos a ustedes, pero me odia a mí porque yo dejo claro que sus caminos son malvados.
La mente humana y pecaminosa es reacia a Dios porque se niega a obedecer la ley de Dios. Y de hecho, no puede hacerlo;
El Señor va a reivindicar a su pueblo; será misericordioso con sus siervos cuando vea que no les quedan fuerzas y que todos se han ido, ya sean esclavos o libres.