¿No entienden que el Señor, el Dios de Israel, dio el reino de Israel a David y a sus descendientes para siempre mediante un acuerdo vinculante?
Levítico 2:13 - Versión Biblia Libre Todas tus ofrendas de granos deben ser sazonadas con sal. No dejes la sal del pacto de Dios fuera de tu ofrenda de grano. Añade sal a todas tus ofrendas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y sazonarás con sal toda ofrenda que presentes, y no harás que falte jamás de tu ofrenda la sal del pacto de tu Dios; en toda ofrenda tuya ofrecerás sal. Biblia Nueva Traducción Viviente Sazona con sal todas tus ofrendas de grano, para acordarte del pacto eterno de Dios. Nunca te olvides de poner sal a las ofrendas de grano. Biblia Católica (Latinoamericana) pues así como la alianza con tu Dios es alianza de sal, también estará la sal en tus ofrendas: todas serán saladas. La Biblia Textual 3a Edicion Sazonarás con sal todo presente de tu ofrenda vegetal, y nunca dejarás que la sal del pacto de tu Dios falte de tu ofrenda. En toda ofrenda tuya presentarás sal. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sazonarás con sal cualquier oblación que ofrezcas y no tolerarás que a tu oblación le falte la sal de la alianza de tu Dios: en todas tus ofrendas ofrecerás sal. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sazonarás con sal toda ofrenda de tu presente; y no harás que falte jamás de tu presente la sal del pacto de tu Dios: en toda ofrenda tuya ofrecerás sal. |
¿No entienden que el Señor, el Dios de Israel, dio el reino de Israel a David y a sus descendientes para siempre mediante un acuerdo vinculante?
hasta cien talentos de plata, cien corsos de trigo, cien baños de vino, cien baños de aceite de oliva y cantidades ilimitadas de sal.
Añade un poco de sal y haz incienso puro y santo mezclado como el producto de un experto perfumista.
Los ofrecerás al Señor. Los sacerdotes rociarán sal sobre ellos y los sacrificarán al Señor como holocausto.
“Te doy todas las ofrendas voluntarias que los israelitas presentan al Señor así como a tus hijos e hijas como una regla permanente. Es un acuerdo permanente de sal ante el Señor para ti y tus descendientes”.
“Ustedes son la sal de la tierra, pero si la sal pierde su sabor, ¿cómo podrán hacer que sea salada nuevamente? No sirve para nada, sino que se bota y es pisoteada.
Tengan gracia al hablar. Asegúrense de hablar con buen gusto, y piensen en la mejor manera de responder a todos.