adoptando los caminos de las naciones que el Señor había expulsado antes de los israelitas, y las prácticas paganas introducidas por los reyes de Israel.
Levítico 18:3 - Versión Biblia Libre No sigas los caminos de Egipto, donde vivías, y no sigas los caminos de Canaán, donde te llevaré. No adoptes sus prácticas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 No haréis como hacen en la tierra de Egipto, en la cual morasteis; ni haréis como hacen en la tierra de Canaán, a la cual yo os conduzco, ni andaréis en sus estatutos. Biblia Nueva Traducción Viviente no se comporten como la gente de Egipto, donde ustedes vivían, o como la gente de Canaán, adonde los llevo. No deberán imitar su estilo de vida. Biblia Católica (Latinoamericana) No hagan lo que se hace en la tierra de Egipto, donde ustedes han vivido, ni hagan lo que se hace en la tierra de Canaán, hacia donde los llevo. Ustedes no seguirán sus tradiciones. La Biblia Textual 3a Edicion No haréis como hacen en la tierra de Egipto en la cual morasteis, ni haréis como hacen en la tierra de Canaán adonde Yo os estoy conduciendo. No seguiréis sus costumbres. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No haréis lo que se hace en el país de Egipto, donde habéis vivido, ni lo que se hace en la tierra de Canaán, adonde os voy a introducir; no lo haréis ni seguiréis sus costumbres. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No haréis como hacen en la tierra de Egipto, en la cual morasteis; ni haréis como hacen en la tierra de Canaán, a la cual yo os conduzco; ni andaréis en sus estatutos. |
adoptando los caminos de las naciones que el Señor había expulsado antes de los israelitas, y las prácticas paganas introducidas por los reyes de Israel.
No debes inclinarte ante sus dioses ni adorarlos, ni seguir sus prácticas paganas. Más bien destruirás sus ídolos y derribarás sus altares.
“No dejó la prostitución que había iniciado en Egipto: los hombres se acostaban con ella cuando era joven, estrujaban sus pechos vírgenes y la utilizaban para satisfacer su apetito sexual.
No sigas las prácticas de las naciones que estoy expulsando por ti. Las detesté porque hicieron todas estas cosas malvadas.
No sigan los caminos de este mundo; por el contrario, sean transformados por la renovación espiritual de sus mentes, a fin de que puedan demostrar cómo es realmente la voluntad de Dios: buena, agradable, y perfecta.
Vieron sus repugnantes prácticas religiosas y sus ídolos de madera y piedra, y plata y oro.
Cuando el Señor su Dios los haya expulsado delante de ustedes, no piensen: “Como somos un buen pueblo, el Señor nos ha traído aquí para apoderarnos de este país”. No, el Señor está expulsando a estas naciones delante de ustedes porque son naciones muy malvadas.