Entonces el Señor le preguntó a Eva: “¿Por qué has hecho esto?” “La serpiente me engañó, y yo lo comí”, respondió ella.
Levítico 12:5 - Versión Biblia Libre Si una mujer tiene una hija, estará impura durante dos semanas, de la misma manera que lo está durante su período menstrual. La mujer debe esperar otros sesenta y seis días para la purificación de su sangre. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y si diere a luz hija, será inmunda dos semanas, conforme a su separación, y sesenta y seis días estará purificándose de su sangre. Biblia Nueva Traducción Viviente Si una mujer da a luz una hija, quedará ceremonialmente impura durante dos semanas, así como es impura durante su período menstrual. Después de esperar sesenta y seis días, ella quedará purificada del flujo de sangre del parto. Biblia Católica (Latinoamericana) Si dio a luz una niña, estará impura dos semanas, y lo mismo será doble el tiempo de su purificación: esperará sesenta y seis días la purificación de su sangre. La Biblia Textual 3a Edicion Pero si da a luz una hembra, entonces estará impura dos semanas, como en su menstruación, y permanecerá sesenta y seis días purificándose de su sangre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si diere a luz una niña, será impura durante dos semanas, como durante la menstruación, y permanecerá en casa sesenta y seis días más, para purificar la sangre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y si diere a luz una hija, será inmunda dos semanas, conforme a su separación, y sesenta y seis días estará purificándose de su sangre. |
Entonces el Señor le preguntó a Eva: “¿Por qué has hecho esto?” “La serpiente me engañó, y yo lo comí”, respondió ella.
Toda mujer que quede embarazada y tenga un niño, será impura durante una semana, de la misma manera que es impura durante su período.
La mujer debe esperar otros treinta y tres días para la purificación de su sangrado. No se le permite tocar nada sagrado, y no se le permite entrar en el santuario hasta que termine el tiempo de purificación.
Una vez que el tiempo de purificación haya terminado para un hijo o una hija, la mujer debe traer un cordero de un año como ofrenda quemada y una paloma joven o una tórtola como ofrenda de purificación. Debe llevar sus ofrendas al sacerdote a la entrada del Tabernáculo de Reunión.