Así que esto es lo que dice el Señor: Si vuelves a mí, te aceptaré de nuevo y volverás a servirme. Si lo que hablas son palabras que valen la pena y no tonterías, serás mi portavoz, Jeremías. Ellos deben ser los que te sigan; tú no debes seguirlos.
Levítico 10:10 - Versión Biblia Libre Debes darte cuenta de la diferencia entre lo santo y lo ordinario, entre lo limpio y lo impuro, Más versionesBiblia Reina Valera 1960 para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio, Biblia Nueva Traducción Viviente Deben distinguir entre lo sagrado y lo común, entre lo que es ceremonialmente impuro y lo que es puro. Biblia Católica (Latinoamericana) Así serán capaces de distinguir entre lo santo y lo profano, entre lo impuro y lo puro, La Biblia Textual 3a Edicion para poder distinguir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio, Biblia Serafín de Ausejo 1975 para que sepáis discernir entre lo santo y lo profano, entre lo puro y lo impuro, Biblia Reina Valera Gómez (2023) y para poder discernir entre lo santo y lo profano, y entre lo inmundo y lo limpio; |
Así que esto es lo que dice el Señor: Si vuelves a mí, te aceptaré de nuevo y volverás a servirme. Si lo que hablas son palabras que valen la pena y no tonterías, serás mi portavoz, Jeremías. Ellos deben ser los que te sigan; tú no debes seguirlos.
“Sus sacerdotes pervierten mi ley y hacen impuras mis cosas sagradas. No distinguen entre lo santo y lo ordinario, y no separan lo limpio de lo impuro. Se olvidan de mis sábados y hacen que la gente no me respete.
Deben enseñar a mi pueblo la diferencia entre lo que es santo y lo que es común, y explicarle cómo distinguir entre lo que es limpio y lo que es impuro.
Debes reconocer la diferencia entre lo sucio y lo limpio, entre los animales que se pueden comer y los que no”.
El sacerdote debe inspeccionarlo, y si la hinchazón de la llaga en su calva o frente se ve rojiblanca como una enfermedad de la piel,
Se utilizan para decidir si algo está limpio o sucio. Estas son las normas relativas a las enfermedades de la piel y el moho”.
A los que tienen mentes puras, todo les parece puro; pero para los que son corruptos y se niegan a creer en Dios, nada es puro. Porque tanto sus mentes como sus conciencias están corrompidas.