Sométanse a su hijo para que no se enoje y mueran repentinamente. Su ira se inflama de repente, pero felices son los que acuden a él buscando protección.
Juan 6:29 - Versión Biblia Libre Jesús respondió: “Lo que Dios quiere que hagan es que crean en aquél a quien Él envió”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús les dijo: —La única obra que Dios quiere que hagan es que crean en quien él ha enviado. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús respondió: 'La obra de Dios es ésta: creer en aquel que Dios ha enviado. La Biblia Textual 3a Edicion Respondió Jesús, y les dijo: Ésta es la obra de Dios: que creáis en el que Él envió. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús les respondió: 'Ésta es la obra de Dios: que creáis en aquel a quien él ha enviado'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que Él ha enviado. |
Sométanse a su hijo para que no se enoje y mueran repentinamente. Su ira se inflama de repente, pero felices son los que acuden a él buscando protección.
Mientras Pedro aún hablaba, una nube brillante los cubrió. Entonces se escuchó una voz que salía desde la nube, que decía: “Este es mi hijo a quien amo, el cual me complace. Escúchenlo”.
Todo el que crea y sea bautizado será salvo, pero todo el que elija no creer, será condenado.
Cualquiera que confía en el Hijo tiene vida eterna, pero cualquiera que se niega a creer en el Hijo, no experimentará vida eterna, sino que sigue bajo la condenación de Dios.
“Ustedes examinan las Escrituras porque piensan que a través de ellas obtendrán la vida eterna. ¡Pero la evidencia que ellas dan está a mi favor!
Entonces ellos le preguntaron: “¿Qué tenemos que hacer para hacer la voluntad de Dios?”
Porque yo no descendí del cielo para hacer mi voluntad sino la voluntad del que me envió.
Tal como me envió el Padre viviente y yo vivo por el Padre, de igual modo, todo aquel que se alimenta de mi vivirá por mí.
Recordamos delante de nuestro Dios y Padre la manera como ustedes practican la fe en él, y cómo trabajan arduamente con amor, y que con paciencia guardan la esperanza de nuestro Señor Jesucristo.
Y cuando su experiencia culminó, se convirtió en la fuente de salvación eterna para todos los que hacen su voluntad,
Sepan que su fe en Dios iba de la mano con lo que hizo, y por medio de lo que hizo su fe en Dios fue completa.
Y esto es lo que él manda: que debemos confiar en el nombre de su Hijo Jesucristo, y amarnos unos a otros, así como él nos mandó.
Todo el que cree que Jesús es el Cristo nacido de Dios, y el que ama al Padre también ama a su hijo.
A los que sean victoriosos y obedezcan lo que yo ordeno hasta el fin, les daré autoridad sobre las naciones.