“Benditos los ojos de ustedes, porque pueden ver. También sus oídos, porque pueden oír.
Juan 20:29 - Versión Biblia Libre “Crees en mí porque me has visto”, le dijo Jesús. “Felices aquellos que no han visto, y sin embargo aún creen en mí”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Jesús le dijo: —Tú crees porque me has visto; benditos son los que creen sin verme. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús replicó: 'Crees porque me has visto. ¡Felices los que no han visto, pero creen!' La Biblia Textual 3a Edicion Jesús le dice: ¿Porque me has visto, has creído? Bienaventurados los que no vieron y creyeron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dícele Jesús: '¿Porque me has visto has creído? ¡Bienaventurados los que creen sin haber visto!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jesús le dijo: Tomás, porque me has visto, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron. |
“Benditos los ojos de ustedes, porque pueden ver. También sus oídos, porque pueden oír.
¡Cuán afortunada eres, porque estás segura de que el Señor hará lo que te ha prometido!”
Entonces el otro discípulo que había llegado primero a la tumba, entró también.
“A menos que vean señales y milagros, ustedes no creerán realmente en mi”, dijo Jesús.
Ahora bien, nuestra fe en Dios es la seguridad de lo que esperamos, la evidencia de lo que no podemos ver.
Por fe en Dios, salió de Egipto y no tuvo temor de la ira del Faraón, sino que siguió adelante con sus ojos fijos en el Dios invisible.
Todas estas personas, aunque tenían la aprobación de Dios, no recibieron lo que Dios había prometido.
Ustedes lo aman aunque nunca lo han visto. Aunque no pueden verlo ahora, creen en él y están llenos de una felicidad maravillosa e indescriptible.