Juan 10:2 - Versión Biblia Libre El que entra por la puerta es el pastor de las ovejas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero el que entra por la puerta es el pastor de las ovejas. Biblia Católica (Latinoamericana) El que entra por la puerta es el pastor de las ovejas. La Biblia Textual 3a Edicion Pero el que entra por la puerta, es el pastor de las ovejas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 el que entra por la puerta, ése es el pastor de las ovejas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas el que entra por la puerta, el pastor de las ovejas es. |
Por favor escúchanos, pastor de Israel, tú, que guías a los descendientes de José como a un rebaño. Tú, que te sientas en tu trono sobre los querubines, brilla
Las palabras de los sabios son como arreadores para el ganado. Sus dichos recopilados son como clavos bien puestos por un pastor.
Cuida de su rebaño como un pastor. Coge a los corderos en brazos y los estrecha contra su pecho. Conduce a los que amamantan a las crías.
Entonces ellos pensó en los días de antaño, cuando Moisés sacó a su pueblo de Egipto. Gritaron: ¿Dónde está el que llevó a Israel a través del mar, junto con los pastores de su rebaño? ¿Dónde está el que puso su Espíritu Santo en medio de su pueblo?
Pondré a un solo pastor a cargo de ellas, mi siervo David, y él las cuidará. Él las cuidará y será su pastor.
Él será nuestra Fuente de paz cuando los asirios invadan nuestra tierra y destruyan nuestras fortalezas. Entonces designaremos líderes fuertes,
Escuchen a los aullidos de los pastores, porque sus pastizales están destruidos. Escuchen los rugidos de los leoncillos, porque la selva del río Jordán ha sido destruida.
Los que compran las ovejas para matarlas no sienten culpa por ello; y los que las venden dicen: “¡Alabado sea el Señor! ¡Ahora soy rico!” Ni aún sus pastores se preocupan por ellos.
En un mes despedí a tres pastores. Mi paciencia con ellos se agotó, y ellos también me odiaron.
¡Levántate, espada mía! ¡Ataca a mi pastor, al hombre que ha estado junto a mi! declara el Señor. Golpea al pastor y las ovejas serán dispersas, y yo levantaré mi mano contra los corderos.
No es lo que entra por la boca lo que los contamina, sino lo que sale de ella”.
Entonces Jesús les explicó nuevamente. “Les digo la verdad: Yo soy la puerta del redil.
Yo soy la puerta. Todo el que entra a través de mi, será sanado. Podrá ir y venir, y encontrará la comida que necesite.
Cuídense ustedes mismos y cuiden el rebaño, el cual les ha sido encomendado por el Espíritu Santo para que cuiden de él. Alimenten la iglesia del Señor, la cual ha comprado con su propia sangre.
No descuides el don de la gracia de Dios que tienes y que te fue dado por inspiración profética cuando los ancianos de la iglesia impusieron sus manos sobre ti.
La razón por la cual te dejé en Creta fue para que organizaras lo que era necesario y para designar ancianos en cada ciudad, como te dije.
Ahora pues, que el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran pastor de las ovejas, y lo hizo con la sangre de un pacto eterno,
En un tiempo ustedes eran como ovejas que habían perdido su camino, pero ahora han regresado al pastor, al que cuida de ustedes.
Cuando aparezca el Pastor supremo, ustedes recibirán una corona de gloria, que nunca se dañará.
Este es el significado de las siete estrellas que viste en mi mano derecha, y los siete candelabros de oro: las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias, y los siete candelabros son las siete iglesias.