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Jeremías 16:7 - Versión Biblia Libre

No se celebrarán recepciones fúnebres para consolar a los que lloran; ni siquiera se ofrecerá una bebida reconfortante ante la pérdida de un padre o una madre.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

ni partirán pan por ellos en el luto para consolarlos de sus muertos; ni les darán a beber vaso de consolaciones por su padre o por su madre.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Nadie ofrecerá una comida para consolar a quienes estén de luto por un muerto, ni siquiera por la muerte de una madre o de un padre. Nadie enviará una copa de vino para consolarlos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Tampoco se repartirá pan en los velorios, ni se ofrecerá vino para consolar a los deudos. Nadie servirá a los hijos la copa del consuelo el día de la muerte de sus padres.

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La Biblia Textual 3a Edicion

ni partirán pan para consolar al que está de luto, ni le darán la copa del consuelo por su padre o por su madre.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

No se partirá el pan con el que está de luto, para consolarlo por un muerto, ni se le dará a beber la copa de la consolación por su padre o por su madre'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

ni partirán pan de luto por ellos, para consolarles de sus muertos; ni les darán a beber vaso de consolaciones por su padre o por su madre.

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Otras versiones



Jeremías 16:7
8 Referencias Cruzadas  

Entonces todos sus hermanos y amigos que había conocido antes vinieron y comieron con él en su casa. Le mostraron su simpatía y lo consolaron por todos los problemas que el Señor le había causado. Cada uno de ellos le dio dinero y un anillo de oro.


Entonces me puse a pensar en todas las formas en que la gente oprime a los demás aquí en la tierra. Miren las lágrimas de los oprimidos: ¡no hay nadie que los consuele! Los poderosos los oprimen, ¡y no hay nadie que los consuele!


No lloren por el rey que murió. No lloren por él. En cambio, lloren por el rey que está exiliado, que nunca regresará, que nunca volverá a ver su patria.


Su impureza contamina sus faldas. No pensó en lo que pasaría. Su caída fue un increíble, y nadie estuvo allí para consolarla. “¡Por favor, Señor, mira cuánto estoy sufriendo, porque el enemigo ha ganado!”, dice ella.


Llora en silencio. No hagas ningún ritual por el muerto. Vístete normalmente: ponte el turbante y ponte las sandalias en los pies. No te tapes la cara y no comas el pan que usan los dolientes”.


Tú no podrás traer inguna ofrenda de vino al Señor. Ninguno de tus sacrificios le complacerá. Tus sacrificios serán como la comida de quien guarda luto: todos los que comen estarán impuros. Ustedes mismos comerán esta comida, pero no entrarán en la casa del Señor.


No he comido nada del santo diezmo mientras estaba de luto, ni he tomado nada de él mientras estaba sucio, ni lo he usado como ofrenda para los muertos. He obedecido al Señor mi Dios. He hecho todo lo que me ordenaste hacer.