El rey le preguntó: “¿Qué pasa, reina Ester? ¿Qué quieres? Te lo daré, tanto como la mitad de mi imperio”.
Ester 7:2 - Versión Biblia Libre En esta segunda cena, mientras bebían vino, el rey volvió a preguntar a Ester: “¿Qué es lo que realmente pides, reina Ester? Se te dará. ¿Qué quieres? Lo tendrás, tanto como la mitad de mi imperio”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y en el segundo día, mientras bebían vino, dijo el rey a Ester: ¿Cuál es tu petición, reina Ester, y te será concedida? ¿Cuál es tu demanda? Aunque sea la mitad del reino, te será otorgada. Biblia Nueva Traducción Viviente En esta segunda ocasión, mientras bebían vino, el rey volvió a decir a Ester: —Dime lo que desees, reina Ester. ¿Cuál es tu petición? ¡Yo te la daré, aun si fuera la mitad del reino! Biblia Católica (Latinoamericana) Ese segundo día, el rey dijo de nuevo a Ester en el momento en que le servían el vino: '¿Qué pides, reina Ester? ¡Lo que pidas se te concederá! ¿Cuál es tu deseo? Aunque fuera la mitad de mi reino, te la daré». La Biblia Textual 3a Edicion Y al segundo día, mientras bebían vino en el banquete, el rey volvió preguntar a Ester: ¿Cuál es tu petición, reina Ester? Pues te será concedida. ¿Cuál es tu demanda? ¡Hasta la mitad del reino te será concedido! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y también durante el segundo día del banquete preguntó el rey a Ester: '¿Cuál es tu deseo, reina Ester?, pues se te concederá. ¿Cuál es tu petición? Aunque sea la mitad del reino, se te dará'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y también el segundo día dijo el rey a Esther en el banquete del vino: ¿Cuál es tu petición, reina Esther, y se te dará? ¿Cuál es tu demanda? Aun hasta la mitad del reino, y te será concedida. |
El rey le preguntó: “¿Qué pasa, reina Ester? ¿Qué quieres? Te lo daré, tanto como la mitad de mi imperio”.
Mientras bebían el vino, el rey le preguntó a Ester: “¿Qué es lo que realmente pides? Se te dará. ¿Qué quieres? Lo tendrás, tanto como la mitad de mi imperio”.
éste dijo a la reina Ester: “Los judíos han matado y destruido a quinientos hombres en la fortaleza de Susa, incluidos los diez hijos de Amán. ¡Imagina lo que han hecho en el resto de las provincias reales! Ahora, ¿qué es lo que quieres pedir? Se te dará. ¿Qué más quieres? Se te concederá”.
“Pídeme lo que quieras, y te lo daré”. Y confirmó su promesa con un juramento, “Te daré hasta la mitad de mi reino”.
Hasta ahora ustedes no han pedido nada en mi nombre, así que pidan y recibirán, y su alegría estará completa.
Entonces el comandante tomó al joven de la mano y lo llevó aparte. “¿Qué tienes que decirme?” le preguntó en voz baja.