Mi padre les puso una carga pesada, y yo la haré aún más pesada. Mi padre te castigó con látigos; yo los castigaré con escorpiones’”.
Apocalipsis 9:10 - Versión Biblia Libre Y tenían colas como de escorpiones, con aguijones. Tenían el poder de herir a la gente por seis meses con sus colas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 tenían colas como de escorpiones, y también aguijones; y en sus colas tenían poder para dañar a los hombres durante cinco meses. Biblia Nueva Traducción Viviente Tenían colas que picaban como escorpiones, y durante cinco meses tuvieron el poder para atormentar a la gente. Biblia Católica (Latinoamericana) Tienen colas como de alacranes, y en las colas aguijones para torturar durante cinco meses a los hombres. La Biblia Textual 3a Edicion Tenían colas semejantes a las de los escorpiones, con aguijones, y su poder° estaba en sus colas para dañar a los hombres durante cinco meses. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Sus colas son parecidas a las de escorpiones, con aguijones, y en sus colas está su poder de dañar a los hombres por cinco meses. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y tenían colas como de escorpiones, y tenían en sus colas aguijones, y el poder de hacer daño a los hombres cinco meses. |
Mi padre les puso una carga pesada, y yo la haré aún más pesada. Mi padre te castigó con látigos; yo los castigaré con escorpiones’”.
contestó utilizando el consejo de los jóvenes. Les dijo: “Mi padre les impuso una pesada carga, y yo la haré aún más pesada. Mi padre te castigó con látigos; yo te castigaré con escorpiones”.
“Hijo de hombre, no tengas miedo de ellos ni de lo que digan. No tengas miedo aunque estés rodeado de zarzas y espinas, aunque vivas entre escorpiones. No tengas miedo de lo que digan ni te desanimes por la forma en que te miran, aunque sean una familia rebelde.
El poder de los caballos estaba en sus colas y en sus bocas, pues sus colas eran como cabezas de serpientes que usaban para herir a la gente.
Salieron langostas del humo hasta la tierra, y se les dio poder como de escorpiones.
Y no tenían permiso de matar, pero podían torturar a estas personas durante cinco meses. Y la tortura era como el aguijón de un escorpión.