Que I oración se eleve como incienso hacia ti. Elevo mis manos como una ofrenda vespertina.
Apocalipsis 8:4 - Versión Biblia Libre Y de la mano del ángel, el humo del incienso subía junto a las oraciones de los santos ante Dios. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y de la mano del ángel subió a la presencia de Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos. Biblia Nueva Traducción Viviente El humo del incienso, mezclado con las oraciones del pueblo santo de Dios, subió hasta la presencia de Dios desde el altar donde el ángel lo había derramado. Biblia Católica (Latinoamericana) Y la nube de perfumes, con las oraciones de los santos, se elevó de las manos del ángel hasta la presencia de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y el humo del incienso ascendió de mano del ángel, con las oraciones de los santos, a la presencia de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El humo del incienso, junto con las oraciones del pueblo santo, subió de la mano del ángel hasta la presencia de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y el humo del incienso subió de la mano del ángel delante de Dios con las oraciones de los santos. |
Que I oración se eleve como incienso hacia ti. Elevo mis manos como una ofrenda vespertina.
También presentó un plato de oro que pesaba diez siclos llenos de incienso. Como sacrificios trajo
Durante el momento en que se ofrendaba el incienso, había una gran multitud orando afuera.
Entonces Cornelio, asustado, lo miró y preguntó: “¿Qué quieres, Señor?” “Dios ha escuchado tus oraciones, y ha reconocido tu generosidad para con los pobres”, le dijo el ángel a Cornelio.
Entonces el Templo se llenó de humo que provenía de la gloria de Dios y de su poder. Y nadie podía entrar al Templo hasta que las plagas que venían del cielo hubieran terminado.
Entonces vino otro ángel y se puso en pie en el altar. Tenía un incensario de oro y se le dio una gran cantidad de incienso para añadirlo a las oraciones de todos los santos sobre el altar de oro que está frente al trono.