“No, mi señor”, le dijo. “Por favor, escúchame. Yo te regalaré el campo y la cueva que está allí. Te lo regalo y mi pueblo es testigo. Por favor, ve y sepulta a tu difunta”.
2 Samuel 24:22 - Versión Biblia Libre “Tómala, y tu majestad podrá usarla para hacer ofrendas como mejor te parezca”, le dijo Arauná a David. “Aquí están los bueyes para los holocaustos, y aquí están las tablas de trillar y los yugos para los bueyes para la leña. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y Arauna dijo a David: Tome y ofrezca mi señor el rey lo que bien le pareciere; he aquí bueyes para el holocausto, y los trillos y los yugos de los bueyes para leña. Biblia Nueva Traducción Viviente —Tómelo, mi señor el rey, y úselo como usted quiera —le respondió Arauna a David—. Aquí hay bueyes para la ofrenda quemada, y puede usar los tablones de trillar y los yugos de los bueyes como leña para hacer un fuego sobre el altar. Biblia Católica (Latinoamericana) Arauna dijo entonces a David: 'Que el rey mi señor tome y ofrezca todo lo que estime conveniente. Aquí están los bueyes para el holocausto, la rastra y los yugos de los bueyes proporcionarán la leña. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Arauna dijo a David: Tómela y ofrezca mi señor el rey lo que le parezca bien. ¡He aquí los bueyes para el holocausto, y los trillos y los yugos de los bueyes° para leña! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo entonces Arauná a David: 'Tómelo mi señor, el rey, y que ofrezca lo que mejor le parezca. Mira: ahí están los bueyes para el holocausto, los trillos y los yugos de los bueyes para la leña. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Arauna dijo a David: Tome y ofrezca mi señor el rey lo que bien le pareciere; he aquí bueyes para el holocausto, y los trillos y otros pertrechos de los bueyes para leña. |
“No, mi señor”, le dijo. “Por favor, escúchame. Yo te regalaré el campo y la cueva que está allí. Te lo regalo y mi pueblo es testigo. Por favor, ve y sepulta a tu difunta”.
Eliseo lo dejó, tomó su par de bueyes y los sacrificó. Utilizando la madera del yugo de los bueyes como combustible, cocinó la carne y se la dio al pueblo, y ellos la comieron. Luego se fue para seguir y servir a Elías.
David le dijo a Ornán: “Por favor, déjame la era. La compraré por su precio completo. Así podré construir aquí un altar al Señor para que cese la plaga del pueblo”.
Luego construye un altar al Señor, tu Dios, en la forma debida, en la cima de la colina. Con la madera del poste de Asera que cortaste como leña, toma el segundo toro y preséntalo como holocausto”.
El carro entró en el campo de Josué de Bet-semes y se detuvo allí junto a una gran roca. El pueblo cortó la madera del carro y sacrificaron las vacas como holocausto al Señor.