Después de todo esto, Dios habló con Abrán en una visión, y le dijo: “¡No tengas miedo, Abrán! ¡Yo soy tu protector, y tu gran recompensa!”
2 Samuel 2:7 - Versión Biblia Libre Así que sé fuerte y valiente, porque aunque Saúl, tu amo, ha muerto, el pueblo de Judá me ha ungido como su rey”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Esfuércense, pues, ahora vuestras manos, y sed valientes; pues muerto Saúl vuestro señor, los de la casa de Judá me han ungido por rey sobre ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente Ahora que Saúl ha muerto, les pido que sean mis súbditos valientes y leales, igual que el pueblo de Judá, que me ha ungido como su nuevo rey». Biblia Católica (Latinoamericana) Y ahora sigan valientes y animosos. Aunque Saúl ha muerto, los hombres de la casa de Judá me han consagrado como su rey'. La Biblia Textual 3a Edicion Ahora pues, fortalézcanse vuestras manos y sed valientes, pues muerto Saúl vuestro señor, los de la casa de Judá me han ungido como rey sobre ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora, pues, que recobren vigor vuestros brazos y sed valientes; pues, muerto Saúl, vuestro señor, la casa de Judá me ha ungido por rey suyo'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Esfuércense, pues, ahora vuestras manos, y sed valientes; pues que muerto Saúl vuestro señor, los de la casa de Judá me han ungido por rey sobre ellos. |
Después de todo esto, Dios habló con Abrán en una visión, y le dijo: “¡No tengas miedo, Abrán! ¡Yo soy tu protector, y tu gran recompensa!”
Sé valiente y lucha lo mejor que puedas por nuestro pueblo y las ciudades de nuestro Dios. Que el Señor haga lo que considere bueno”.
Que el Señor les demuestre amor leal y confianza, y yo también seré bueno con ustedes por lo que hicieron por Saúl.
Sin embargo, Abner, hijo de Ner, comandante del ejército de Saúl, había tomado a Isboset, hijo de Saúl, a Mahanaim.
Todos los ancianos de Israel acudieron al rey en Hebrón, donde el rey David llegó a un acuerdo con ellos en presencia del Señor. Entonces lo ungieron como rey de Israel.
Entonces Joyadá sacó al hijo del rey, le puso la corona y le entregó un ejemplar de la Ley de Dios. Lo proclamaron rey y lo ungieron. El pueblo aplaudió y gritó: “¡Viva el rey!”.
Entonces les expliqué lo bueno que había sido Dios conmigo y lo que me había dicho el rey. “Pongámonos a reconstruir”, respondieron, y se pusieron a trabajar con entusiasmo.
Estén alerta. Manténganse firmes en su confianza en Dios. Tengan valor. Sean fuertes.
todos sus fuertes guerreros se pusieron en marcha, viajaron toda la noche y descolgaron los cuerpos de Saúl y de sus hijos de la muralla de Bet-sán. Cuando volvieron a Jabes, quemaron allí los cuerpos.
Cuando los israelitas que vivían a lo largo del valle y los del otro lado del Jordán se dieron cuenta de que el ejército israelita había huido y de que Saúl y sus hijos habían muerto, abandonaron sus ciudades y también huyeron. Entonces llegaron los filisteos y se apoderaron de ellas.
¡Sean valientes y luchen como verdaderos hombres, filisteos! De lo contrario, terminarán como esclavos de los israelitas, tal como ellos fueron sus esclavos. Sean hombres de verdad y luchen”.