Sus arqueros nos dispararon desde la muralla y mataron a algunos de los hombres del rey. También mataron a su oficial Urías el hitita”.
2 Samuel 11:25 - Versión Biblia Libre Entonces David le dijo al mensajero: “Dile esto a Joab: ‘No te alteres por esto, pues la espada destruye a la gente al azar. Prosigue tu ataque contra la ciudad y conquístala’. Anímalo diciéndole esto”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y David dijo al mensajero: Así dirás a Joab: No tengas pesar por esto, porque la espada consume, ora a uno, ora a otro; refuerza tu ataque contra la ciudad, hasta que la rindas. Y tú aliéntale. Biblia Nueva Traducción Viviente —Bien, dile a Joab que no se desanime —dijo David—. ¡La espada devora a este hoy y a aquel mañana! La próxima vez esfuércense más, ¡y conquistarán la ciudad! Biblia Católica (Latinoamericana) David dijo al mensajero: 'Dile a Joab que no se preocupe más por este asunto, porque la espada devora tanto aquí como acullá. Dile que refuerce su ataque contra la ciudad hasta que la destruya; que se mantenga firme'. La Biblia Textual 3a Edicion Y David dijo al mensajero: Así dirás a Joab: Que esto no te desagrade, porque la espada devora tanto a uno como a otro. Refuerza tu ataque contra la ciudad y destrúyela. Y tú, aliéntale. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces dijo David al mensajero: 'Esto has de decir a Joab: 'No te aflijas por este incidente, pues la espada devora unas veces a unos y otras veces a otros. Refuerza tu ataque contra la ciudad y arrásala. Y tú dale ánimo''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y David dijo al mensajero: Así dirás a Joab: No tengas pesar por esto, porque la espada consume, tanto a uno, como a otro: Refuerza tu ataque contra la ciudad, hasta que la rindas. Y tú aliéntalo. |
Sus arqueros nos dispararon desde la muralla y mataron a algunos de los hombres del rey. También mataron a su oficial Urías el hitita”.
Cuando la mujer de Urías se enteró de que su marido había muerto, se puso de luto por él.
En ese momento, Joab había estado luchando contra la ciudad amonita de Rabá, y había capturado la fortaleza real.
Pero los israelitas se animaron unos a otros a tener confianza, y tomaron las mismas posiciones que tenían el primer día.
pero no dejen de vigilarla. Si sube por el camino hacia su patria, hacia Bet-Semes, entonces es el Señor quien nos ha causado todo este terrible problema. Pero si no lo hace, entonces sabremos que no fue él quien nos castigó, sino que nos ocurrió por casualidad”.