La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




2 Corintios 4:1 - Versión Biblia Libre

Así pues, como Dios en su misericordia nos ha proporcionado esta nueva manera de relacionarnos con él, no nos rendimos.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Por lo tanto, ya que Dios, en su misericordia, nos ha dado este nuevo camino, nunca nos damos por vencidos.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Ese es nuestro ministerio, y como lo tenemos por gracia de Dios, no nos desanimamos.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio, según la misericordia que recibimos, no desmayamos;

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Por lo tanto, investidos por la misericordia [de Dios] de este ministerio, no perdemos el ánimo.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Por tanto, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos;

Ver Capítulo
Otras versiones



2 Corintios 4:1
19 Referencias Cruzadas  

Incluso los jóvenes se debilitan y se cansan; caen cuando están agotados.


Pero los que confían en el Señor verán renovadas sus fuerzas. Volarán alto con alas como las águilas. Correrán y no se cansarán. Caminarán y no se agotarán.


Te has estado quejando, diciendo: “¡Tengo tantos problemas porque el Señor me ha dado tristeza para agravar mi dolor! Me he agotado con mis gemidos. No consigo ningún alivio”.


Jesus les contó este relato para animarlos a orar en todo momento y no rendirse:


¿Quién es Apolos, después de todo? ¿Y quién es Pablo? Nosotros solo somos siervos por medio de los cuales ustedes llegaron a creer. Cada uno de nosotros hace la obra que Dios nos asignó.


Ahora, en cuanto a las “personas que no están casadas”, no tengo una instrucción específica del Señor, así que permítanme darles mi opinión como alguien que mediante la misericordia del Señor es considerado digno de confianza.


¡Y como tenemos esta esperanza segura, hablamos sin temor!


También nos da la capacidad de ser ministros de un nuevo acuerdo, no basado en la letra de la ley, sino en el Espíritu. La letra de la ley mata, pero el Espíritu da vida.


Por eso no nos rendimos. Aunque nuestros cuerpos físicos están cayéndose a pedazos, nuestro interior se renueva cada día.


Dios lo hizo transformándonos de enemigos en amigos por medio de Cristo. Dios nos encomendó este mismo trabajo de convertir a sus enemigos en sus amigos.


No nos cansemos nunca de hacer el bien, pues segaremos en el momento apropiado, si somos perseverantes.


Por eso les pido que no se desanimen por mi sufrimiento, ¡es por ustedes y deberían apreciarlo!


¡Todo lo puedo en Cristo, porque él me fortalece!


Hermanos y hermanas, no dejen de hacer el bien.


Aunque yo solía insultar a Dios, y perseguía y abusaba de su pueblo, él me mostró misericordia por causa de mi ignorancia e incredulidad.


Piensen en Jesús, quien soportó tal hostilidad de un pueblo pecador, y así no se cansarán ni se desanimarán.


En el pasado, ustedes no eran nadie, pero ahora son el pueblo de Dios. En el pasado carecieron de misericordia, pero ahora la han recibido.


Conozco tu paciencia, y lo que soportaste por mi causa, y sé que nunca te rendiste.