¡Vayan y examinen la ley de Dios y sus instrucciones! Si lo que dicen no corresponde con la palabra de Dios, no habrá amanecer para ellos.
1 Corintios 9:8 - Versión Biblia Libre ¿Acaso hablo solo desde un punto de vista humano? ¿No dice la ley lo mismo? Más versionesBiblia Reina Valera 1960 ¿Digo esto solo como hombre? ¿No dice esto también la ley? Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Expreso meramente una opinión humana o dice la ley lo mismo? Biblia Católica (Latinoamericana) Esto que les recuerdo no son solamente costumbres del mundo, pues la Ley dice lo mismo. La Biblia Textual 3a Edicion ¿Acaso digo esto según el hombre?° ¿O no dice también estas cosas la ley? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Acaso esto que digo es mero razonamiento humano? ¿No las dice también la ley? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Digo esto como hombre? ¿No dice esto también la ley? |
¡Vayan y examinen la ley de Dios y sus instrucciones! Si lo que dicen no corresponde con la palabra de Dios, no habrá amanecer para ellos.
¿Significa eso que por creer en Dios desechamos de la ley? ¡Por supuesto que no! De hecho, afirmamos la importancia de la ley.
Pero si el hecho de que estamos equivocados ayuda a demostrar que Dios está en lo correcto, ¿qué debemos concluir? ¿Que Dios se equivoca al pronunciar juicio sobre nosotros? (Aquí estoy hablando desde una perspectiva humana).
Hago uso de este ejemplo cotidiano porque su forma humana de pensar es limitada. Así como una vez ustedes mismos se hicieron esclavos de la inmoralidad, ahora deben volverse esclavos de lo que es puro y recto.
“Las mujeres deben permanecer en silencio en las iglesias. No deberían hablar. Deben tener respeto por su situación, como lo dicen las leyes.
Pero en mi opinión, ella sería más feliz si no se volviera a casar, y creo que cuando digo esto también tengo el Espíritu de Dios.
Permítanme aclarar esto, amigos míos, respecto a la buena noticia que estoy declarando: Que no vino de ningún ser humano.
Hay otra cosa, y es que siempre le damos gracias a Dios porque cuando ustedes escucharon y aceptaron su palabra, no la recibieron como si fueran palabras humanas, sino como lo que realmente es: como la palabra de Dios. Y esto es lo que obra en los que creen en él.
Así que todo el que rechaza esta enseñanza, no está rechazando lo que dice un ser humano, sino que está rechazando a Dios, quien es el que da su Espíritu Santo.