La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Éxodo 9:15 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Que si yo quisiera, hubiera podido usar todo mi poder para mandar una peste que acabara con todos los egipcios de una vez,

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Porque ahora yo extenderé mi mano para herirte a ti y a tu pueblo de plaga, y serás quitado de la tierra.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

A estas alturas, bien podría haber ya extendido mi mano y haberte herido a ti y a tu pueblo con una plaga capaz de exterminarlos de la faz de la tierra.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Yo podría haber vuelto mi mano contra ti y tu pueblo, y habrían perdido la vida con semejante peste.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Porque ahora, si Yo hubiera lanzado mi mano para azotarte con pestilencia a ti y a tu pueblo, ya habrías sido exterminado de la tierra.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Si en un principio hubiera extendido mi mano y te hubiese herido con la peste, a ti y a tu pueblo, habrías desaparecido de la tierra.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque ahora yo extenderé mi mano para herirte a ti y a tu pueblo de pestilencia, y serás quitado de la tierra.

Ver Capítulo
Otras versiones



Éxodo 9:15
13 Referencias Cruzadas  

¿Qué otras naciones en la tierra han recibido bendiciones similares a las de Israel tu pueblo? Porque tú rescataste de la esclavitud a tu nación escogida, para traer gloria a tu nombre. Tú la rescataste para ti de Egipto, de las otras naciones y de sus dioses.


Este era un gran pecado, y dio como resultado la destrucción del reinado de Jeroboán, y la muerte de toda su familia.


Aquella misma noche, el ángel del Señor dio muerte a ciento ochenta y cinco mil soldados del ejército asirio. A la mañana siguiente, el campo estaba lleno de cadáveres.


El agua cubrió el sendero, y a los caballos y sus jinetes. Y todo el ejército del faraón, que perseguía a Israel a través del mar, pereció.


Yo me encargaré de presionarlo hasta que los deje salir.


Si no obedeces, entonces él enviará una plaga que realmente vendrá sobre ti, tus siervos y toda la gente de Egipto. Dile que le voy a demostrar que no hay otro Dios en toda la tierra.


pero no lo hice, porque quiero que todos sepan cuán poderoso soy, y para que mi nombre se mencione en todo el país.


el Señor hará que se desate una plaga mortal que destruirá los caballos, los burros, los camellos, los rebaños de ovejas, y las manadas de vacas.


y así fue. A la mañana siguiente, todos los animales de los egipcios comenzaron a morirse, pero ni uno solo de los animales de los israelitas se enfermó.


Pero los malvados serán arrancados y expulsados de la tierra.