La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Tito 3:4 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Pero, cuando Dios nuestro Salvador nos mostró su bondad y amor,

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres,

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Sin embargo, Cuando Dios nuestro Salvador dio a conocer su bondad y amor,

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Pero se manifestó la bondad de Dios, nuestro Salvador, y su amor a los hombres;'

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres,

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero el día en que apareció la bondad de Dios nuestro Salvador y su amor a los hombres,

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres,

Ver Capítulo
Otras versiones



Tito 3:4
12 Referencias Cruzadas  

Mi espíritu se regocija en Dios mi Salvador,


No reconoces que Dios es bueno, que tiene paciencia y soporta tu mala conducta. Él está buscando que te arrepientas, pero desprecias su gran bondad.


Te saluda Pablo, apóstol de Cristo Jesús por mandato de Dios nuestro Salvador y de Cristo Jesús, quien nos da confianza en nuestra salvación.


Para Dios nuestro Salvador esto es bueno y agradable,


En efecto, si trabajamos y nos esforzamos es porque hemos puesto nuestra confianza en que el Dios viviente cumplirá sus promesas. Él es el Salvador de todos, especialmente de los que creen.


Dios nos ha mostrado ese amor enviando a nuestro Salvador Cristo Jesús. Él venció a la muerte y nos mostró con su luz la vida eterna que tenemos al aceptar el mensaje de la buena noticia.


Ahora, a su debido tiempo, él ha cumplido esa promesa. La cumplió por medio de la predicación que se me ha confiado por orden de Dios nuestro Salvador.


Si Cristo hubiera tenido que hacer lo mismo, habría sufrido muchas veces desde la creación del mundo. Al contrario, ahora, al final de los tiempos, se ha presentado una sola vez y para siempre. De este modo, por medio de su propio sacrificio, acabó con el pecado.


Sigan este consejo ahora que han probado lo bueno que es el Señor.