¿Crees que no puedo pedir ayuda a mi Padre, y al instante pondría a mi disposición más de doce batallones de ángeles?
Mateo 4:11 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Entonces el diablo lo dejó, y unos ángeles llegaron a servirle. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el diablo se fue, y llegaron ángeles a cuidar a Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces lo dejó el diablo y se acercaron los ángeles a servirle. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces lo deja el diablo, y he aquí unos ángeles se acercaron y lo servían. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces lo dejó el diablo, y unos ángeles se acercaron para servirle. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces el diablo le dejó, y he aquí, ángeles vinieron y le servían. |
¿Crees que no puedo pedir ayuda a mi Padre, y al instante pondría a mi disposición más de doce batallones de ángeles?
y le dijo: ―Si eres el Hijo de Dios, tírate abajo, porque la Escritura dice: »“Ordenará que sus ángeles te lleven en brazos, para que no tropieces con piedra alguna”».
Allí fue tentado por Satanás durante cuarenta días. Estaba entre los animales salvajes, y los ángeles le servían.
Todos los días estaba con ustedes en el Templo, y no se atrevieron a ponerme las manos encima. Pero ya ha llegado la hora de ustedes, cuando reinan las tinieblas.
Así que el diablo, habiendo agotado todo recurso de tentación, lo dejó hasta otra oportunidad.
Ya no hablaré más con ustedes, porque viene el príncipe de este mundo. Él no tiene ningún dominio sobre mí.
No hay duda de que son grandes las verdades de nuestra fe: Cristo se presentó como hombre; fue declarado justo por el Espíritu, visto por los ángeles, y anunciado entre las naciones. El mundo ha creído en él, y Dios lo recibió con gloria.
Pues todos los ángeles son solo espíritus que sirven a Dios. Él los envía para ayudar a los que han de ser salvos.
Además, cuando Dios envió a su Hijo primogénito al mundo, dijo: «Que lo adoren todos los ángeles de Dios».