»Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor.
Mateo 26:41 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil. Biblia Nueva Traducción Viviente Velen y oren para que no cedan ante la tentación, porque el espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil». Biblia Católica (Latinoamericana) Estén despiertos y recen para que no caigan en la tentación. El espíritu es animoso, pero la carne es débil. La Biblia Textual 3a Edicion Velad y orad, para que no entréis en tentación; en verdad, el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Velad y orad, para que no ceder en la tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil. |
»Por lo tanto, manténganse despiertos, porque no saben qué día vendrá su Señor.
»Por tanto —agregó Jesús—, manténganse despiertos porque ustedes no saben ni el día ni la hora.
«Es tal la angustia que me invade que me siento morir —les dijo—. Quédense aquí y manténganse despiertos conmigo».
Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil».
Perdona nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todos los que nos ofenden. Y no nos dejes caer en tentación”.
Manténganse despiertos. Oren para que puedan escapar de todo lo que está por suceder y puedan presentarse delante del Hijo del hombre».
Cuando llegaron al lugar, les dijo: «Oren para que no caigan en tentación».
«¿Por qué están durmiendo? —les dijo—. Levántense y oren para que no caigan en tentación».
Los que están sobre las piedras son los que reciben la palabra con alegría cuando la oyen, pero no tienen raíz. Estos creen por algún tiempo, pero se apartan cuando llega la prueba.
La Ley no pudo liberarnos, porque nuestro pecado eliminó su poder. Por eso Dios envió a su propio Hijo en un cuerpo semejante al de nosotros los pecadores. Lo envió para que se ofreciera en sacrificio por el pecado, y de esa manera le quitó al pecado su poder.
Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no hayan sufrido otras personas. Pero Dios es fiel y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida para que puedan resistir.
Por eso disciplino mi cuerpo y lo entreno. Pues, si he predicado a otros la buena noticia, no quiero al final ser descalificado por Dios.
Los que son de Cristo Jesús han hecho morir en la cruz sus malos deseos por el pecado.
Oren en todo momento y, guiados por el Espíritu Santo, hagan sus peticiones y ruegos. Manténganse alerta y sin dejar de orar por todos los creyentes.
Ya se acerca el fin de todas las cosas. Así que, estén alerta y oren con seriedad.
Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
Todo esto demuestra que el Señor sabe librar de la tentación a los que viven como Dios quiere. Pero también sabe castigar a los malvados, y lo hará cuando llegue el día del juicio.
Recuerden lo que Cristo dijo: «¡Cuidado! ¡Vengo como un ladrón! Dichoso el que se mantenga alerta y vestido; así no tendrá que andar desnudo ni sufrir vergüenza por su desnudez».
Tú has obedecido mi mandato de confiar hasta el final. Por eso, yo te protegeré cuando llegue la hora de prueba que vendrá sobre el mundo entero. De esta manera serán probados los que viven en la tierra.