porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas. Y harán maravillas y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos.
Mateo 24:4 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ―Tengan cuidado de que nadie los engañe —les dijo Jesús—. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús les dijo: —No dejen que nadie los engañe, Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús les contestó: 'No se dejen engañar' La Biblia Textual 3a Edicion Jesús respondió y les dijo: Mirad que nadie os engañe. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús les contestó: 'Mirad que nadie os engañe. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. |
porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas. Y harán maravillas y milagros para engañar, de ser posible, aun a los elegidos.
―Tengan cuidado; no se dejen engañar —les dijo Jesús—. Vendrán muchos que, usando mi nombre, dirán: “Yo soy el Cristo”, y dirán: “El tiempo está cerca”. No los sigan ustedes.
Si alguien cree ser importante, cuando en realidad no lo es, se engaña a sí mismo.
Así ya no seremos como niños, que cambian de opinión fácilmente y aceptan como verdad cualquier enseñanza. Pues los falsos maestros son astutos y usan métodos engañosos.
Que nadie los engañe con discursos tontos, porque por esas cosas castiga Dios a los que desobedecen.
No se dejen criticar de esos que mienten diciendo que son humildes y adoran ángeles. Dicen que tienen visiones, pero no es verdad. Se sienten orgullosos de su malvada manera de pensar.
Cuídense de que nadie los engañe con ideas y pensamientos que parecen llenos de sabiduría. Son solo enseñanzas humanas que vienen de los poderes de este mundo. No son las enseñanzas de Cristo.
No se dejen engañar por nadie, porque antes de su regreso los enemigos de Dios lucharán en su contra, y el hombre malvado aparecerá, aunque luego será destruido.
Queridos hermanos en la fe, por el mundo han salido muchos falsos profetas. Por eso, no crean a todos los que dicen hablar de parte del Espíritu. Es mejor que los pongan a prueba para ver si en verdad Dios los ha enviado.