Había entre la gente una mujer que hacía doce años que sufría de constantes derrames de sangre.
Marcos 9:21 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ―¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto? —le preguntó Jesús al padre. ―Desde que era niño —contestó—. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Jesús preguntó al padre: ¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto? Y él dijo: Desde niño. Biblia Nueva Traducción Viviente —¿Hace cuánto tiempo que le pasa esto? —preguntó Jesús al padre del muchacho. —Desde que era muy pequeño —contestó él—. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Jesús preguntó al padre: '¿Desde cuándo le pasa esto?' La Biblia Textual 3a Edicion Y° preguntó a su padre: ¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto? Y él dijo: Desde la niñez, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús preguntó al padre: '¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto?'. Él le respondió: 'Desde la infancia; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jesús preguntó a su padre: ¿Cuánto tiempo hace que le sucede esto? Y él dijo: Desde niño: |
Había entre la gente una mujer que hacía doce años que sufría de constantes derrames de sangre.
Así que se lo llevaron. Tan pronto como vio a Jesús, el espíritu sacudió de tal modo al muchacho que este cayó al suelo y comenzó a revolcarse echando espumarajos.
Muchas veces lo ha echado al fuego y al agua para matarlo. Si puedes hacer algo, ten compasión de nosotros y ayúdanos.
Sin embargo, a esta mujer, que es hija de Abraham, y a quien Satanás tenía atada durante dieciocho largos años, ¿no se le debía quitar esta cadena en sábado?
Había entre la gente una mujer que hacía doce años que sufría de constantes derrames de sangre, sin que nadie pudiera sanarla. Había gastado todo lo que tenía en médicos.
En Listra vivía un hombre que nació con un problema en sus piernas, de modo que no las podía mover. Nunca había podido caminar. Este hombre estaba sentado,
Junto a la entrada llamada Hermosa había un hombre paralítico de nacimiento. Todos los días lo dejaban allí para que pidiera dinero a los que entraban en el Templo.
Pues el hombre que había sido milagrosamente sanado tenía más de cuarenta años.
Allí encontró a un paralítico llamado Eneas, que llevaba ocho años en cama.