Algunos de los fariseos y de los maestros de la Ley le dijeron: ―Maestro, queremos ver alguna señal milagrosa de parte tuya.
Marcos 8:11 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Llegaron los fariseos y comenzaron a discutir con Jesús. Para ponerle una trampa, le pidieron una señal del cielo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Vinieron entonces los fariseos y comenzaron a discutir con él, pidiéndole señal del cielo, para tentarle. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando los fariseos oyeron que Jesús había llegado, se acercaron y comenzaron a discutir con él. Para ponerlo a prueba, exigieron que les mostrara una señal milagrosa del cielo que demostrara su autoridad. Biblia Católica (Latinoamericana) Vinieron los fariseos y empezaron a discutir con Jesús. Querían ponerlo en apuros, y esperaban de él una señal que viniera del Cielo. La Biblia Textual 3a Edicion Y los fariseos salieron y comenzaron a discutir con Él, pidiéndole una señal del cielo,° a fin de tentarlo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Salieron los fariseos y se pusieron a discutir con él, pidiéndole, para ponerle a prueba, una señal venida del cielo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y vinieron los fariseos y comenzaron a altercar con Él, y tentándole, le pedían señal del cielo. |
Algunos de los fariseos y de los maestros de la Ley le dijeron: ―Maestro, queremos ver alguna señal milagrosa de parte tuya.
Algunos fariseos se le acercaron y, para ponerlo a prueba, le preguntaron: ―¿Está permitido que un hombre se divorcie de su esposa por cualquier motivo?
Jesús entró en el Templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los jefes de los sacerdotes y los líderes del pueblo. ―¿Con qué autoridad haces esto? —lo interrogaron—. ¿Quién te dio esa autoridad?
Entonces salieron los fariseos y tramaron cómo tenderle a Jesús una trampa con sus mismas palabras.
Conociendo sus malas intenciones, Jesús respondió: ―¡Hipócritas! ¿Por qué me tienden trampas?
Ese mismo día los saduceos, que decían que no hay resurrección, se le acercaron y le plantearon un problema:
Pero Jesús, sabiendo que fingían, les respondió: ―¿Por qué me tienden trampas? Tráiganme una moneda romana para verla.
Cuando los maestros de la Ley que eran fariseos vieron con quién comía, les preguntaron a sus discípulos: ―¿Por qué Jesús come con cobradores de impuestos y con pecadores?
En esto se presentó un experto en la Ley y, para poner a prueba a Jesús, le hizo esta pregunta: ―Maestro, ¿qué debo hacer para obtener la vida eterna?
―Ustedes nunca van a creer si no ven señales milagrosas y maravillas —le dijo Jesús.
―¿Y qué señal harás para que la veamos y te creamos? ¿Qué puedes hacer? —insistieron ellos—.
Con esta pregunta le estaban tendiendo una trampa, para tener de qué acusarlo. Pero Jesús se inclinó y con el dedo comenzó a escribir en el suelo.
―¿Por qué se pusieron de acuerdo para poner a prueba al Espíritu del Señor? —le dijo Pedro—. ¡Mira! Los que enterraron a tu esposo acaban de regresar y ahora te llevarán a ti.
Tampoco provoquen el enojo de Cristo, como lo hicieron algunos y murieron mordidos por serpientes.