Pero, si decimos: “humano”…, tememos al pueblo, porque todos consideran que Juan era un profeta».
Marcos 12:12 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Cayendo en cuenta de que la parábola iba dirigida contra ellos, buscaban la manera de arrestarlo. Pero tenían miedo de la gente; así que lo dejaron y se fueron. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y procuraban prenderle, porque entendían que decía contra ellos aquella parábola; pero temían a la multitud, y dejándole, se fueron. Biblia Nueva Traducción Viviente Los líderes religiosos querían arrestar a Jesús porque se dieron cuenta de que contaba esa historia en contra de ellos, pues ellos eran los agricultores malvados; pero tenían miedo de la multitud, así que lo dejaron y se marcharon. Biblia Católica (Latinoamericana) Los jefes querían apresar a Jesús, pero tuvieron miedo al pueblo; habían entendido muy bien que la parábola se refería a ellos. Lo dejaron allí y se fueron. La Biblia Textual 3a Edicion Y procuraban prenderlo, porque comprendieron que había dicho la parábola por causa de ellos, pero temían a la multitud. Y dejándolo, se fueron. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellos intentaban apresarlo, pero tuvieron miedo al pueblo; pues se habían dado cuenta de que por ellos había dicho esa parábola. Lo dejaron, pues, y se fueron. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y procuraban prenderle, porque sabían que decía contra ellos aquella parábola; pero temían al pueblo, y dejándole se fueron. |
Pero, si decimos: “humano”…, tememos al pueblo, porque todos consideran que Juan era un profeta».
Los jefes de los sacerdotes y los maestros de la Ley lo oyeron y comenzaron a buscar la manera de matarlo, pues le temían, ya que toda la gente se maravillaba de sus enseñanzas.
Pero, si decimos: “humano”…». Es que temían al pueblo, porque todos consideraban que Juan era realmente un profeta.
Los maestros de la Ley y los jefes de los sacerdotes se dieron cuenta de que la parábola iba dirigida contra ellos. Así que buscaron la manera de arrestarlo en aquel mismo momento, pero temían al pueblo.
Pero, si decimos: “humano”, todo el pueblo nos apedreará, porque están convencidos de que Juan era un profeta».
Algunos de los que vivían en Jerusalén comentaban: «¿No es este al que quieren matar?
Entonces quisieron arrestarlo, pero nadie lo hizo porque aún no había llegado su hora.