La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Lucas 8:33 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Y, cuando los demonios salieron del hombre, entraron en los cerdos. Todos los cerdos huyeron y cayeron al lago por el precipicio, y se ahogaron.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y los demonios, salidos del hombre, entraron en los cerdos; y el hato se precipitó por un despeñadero al lago, y se ahogó.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Así que los demonios salieron del hombre y entraron en los cerdos, y toda la manada se lanzó al lago por el precipicio y se ahogó.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Salieron, pues, del hombre para entrar en los cerdos, y toda la piara se precipitó de lo alto del acantilado, ahogándose en el lago.

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Saliendo entonces del hombre, los demonios entraron en los cerdos, y la piara se precipitó por el despeñadero al lago, y se ahogó.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Salieron, pues, de aquel hombre los demonios y entraron en los cerdos; la piara se arrojó con gran ímpetu al lago por un precipicio y se ahogó.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y los demonios, salidos del hombre, entraron en los puercos; y el hato se arrojó por un despeñadero en el lago, y se ahogó.

Ver Capítulo
Otras versiones



Lucas 8:33
8 Referencias Cruzadas  

―Vayan —les dijo. Así que salieron de los hombres y entraron en los cerdos. Todos los cerdos huyeron y cayeron al lago por el precipicio, y murieron en el agua.


Un día estaba Jesús a orillas del lago de Genesaret, y la gente lo rodeaba para escuchar el mensaje de Dios. Eran muchos y lo apretujaban.


Como había una gran cantidad de cerdos alimentándose en la colina, le rogaron a Jesús que los dejara entrar en ellos. Así que él les dio permiso.


Al ver lo sucedido, los que cuidaban los cerdos corrieron y dieron aviso en el pueblo y por los campos.


Ustedes son de su padre, el diablo, cuyos deseos quieren cumplir. Desde el principio este ha sido un asesino. Nunca dice la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando miente, expresa su propia naturaleza, porque es un mentiroso. ¡Es el padre de la mentira!


Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.


El rey que los dirigía era el ángel del abismo. Su nombre en hebreo es Abadón y en griego, Apolión (que quiere decir: Destructor).