En eso, uno de los que estaban con él extendió la mano, sacó la espada e hirió al siervo del sumo sacerdote, cortándole una oreja.
Lucas 22:38 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ―Mira, Señor —le señalaron los discípulos—, aquí hay dos espadas. ―¡Basta! —les contestó. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces ellos dijeron: Señor, aquí hay dos espadas. Y él les dijo: Basta. Biblia Nueva Traducción Viviente —Mira Señor —le respondieron—, contamos con dos espadas entre nosotros. —Es suficiente —les dijo. Biblia Católica (Latinoamericana) Ellos le dijeron: 'Mira, Señor, aquí hay dos espadas. El les respondió: '¡Basta ya!' La Biblia Textual 3a Edicion Ellos dijeron: Señor, mira, aquí hay dos espadas. Él les dijo: Basta. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellos dijeron: 'Señor, aquí hay dos espadas'. Pero él les contestó: 'Basta ya'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces ellos dijeron: Señor, he aquí dos espadas. Y Él les dijo: Basta. |
En eso, uno de los que estaban con él extendió la mano, sacó la espada e hirió al siervo del sumo sacerdote, cortándole una oreja.
Entonces les dijo: ―Ahora, en cambio, el que tenga un monedero, que lo lleve; así mismo, el que tenga una bolsa. Y el que no tenga espada, que venda su manto y compre una.
Los discípulos que lo rodeaban, al darse cuenta de lo que pasaba, dijeron: ―Señor, ¿atacamos con la espada?
―Mi reino no es de este mundo —contestó Jesús—. Si lo fuera, mis propios guardias pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo.
A nosotros, en cambio, nos interesa, por eso vivimos alertas, como si todo el tiempo fuera de día, siempre viéndolo todo con claridad. Vivimos protegidos por la fe y el amor, como con una coraza protectora. Nuestra seguridad en la salvación nos protege como un casco protege la cabeza.
Resistan sus ataques, nunca dejen de confiar en Cristo. Sepan que sus hermanos en la fe en todo el mundo están soportando la misma clase de sufrimientos.