»¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, hipócritas!, que son como tumbas blanqueadas. Por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de podredumbre.
Lucas 11:48 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) En realidad aprueban lo que hicieron sus antepasados. Ellos mataron a los profetas, y ustedes les construyen las tumbas. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 De modo que sois testigos y consentidores de los hechos de vuestros padres; porque a la verdad ellos los mataron, y vosotros edificáis sus sepulcros. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo cual, ustedes quedan como testigos que aprueban lo que hicieron sus antepasados. Ellos mataron a los profetas, ¡y ustedes se convierten en cómplices al edificar los monumentos! Biblia Católica (Latinoamericana) Así, pues, ustedes reconocen lo que hicieron sus padres, pero siguen en lo mismo: ellos se deshicieron de los profetas, y ustedes ahora pueden construir. La Biblia Textual 3a Edicion Así que sois testigos y consentidores de las obras de vuestros padres, porque ciertamente ellos los mataron, y vosotros edificáis.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Con ello, sois testigos y solidarios de las acciones de vuestros padres, porque ellos los mataron y vosotros les edificáis sepulcros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) De cierto dais testimonio que consentís en los hechos de vuestros padres; porque a la verdad ellos los mataron, y vosotros edificáis sus sepulcros. |
»¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, hipócritas!, que son como tumbas blanqueadas. Por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de podredumbre.
Pero al declararse descendientes de los que mataron a los profetas, se convierten en cómplices.
»¡Ay de ustedes!, que construyen monumentos para los profetas, a quienes los antepasados de ustedes mataron.
Por eso Dios, que es sabio, dijo: “Les enviaré profetas y apóstoles, de los cuales matarán a unos y perseguirán a otros”.
Saben muy bien que Dios ha decidido castigar esa conducta con la muerte. Sin embargo, no solo siguen haciéndolo; también aprueban a quienes lo hacen.
Hermanos en la fe, tomen como ejemplo de sufrimiento y de paciencia a los profetas que hablaron en el nombre del Señor.