La Biblia Online

Anuncios


Toda la Biblia A.T. N.T.




Juan 20:29 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

―Porque me has visto, has creído —le dijo Jesús—. Dichosos los que no han visto y sin embargo creen.

Ver Capítulo
Mostrar Biblia Interlineal

Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Jesús le dijo: Porque me has visto, Tomás, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.

Ver Capítulo

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces Jesús le dijo: —Tú crees porque me has visto; benditos son los que creen sin verme.

Ver Capítulo

Biblia Católica (Latinoamericana)

Jesús replicó: 'Crees porque me has visto. ¡Felices los que no han visto, pero creen!'

Ver Capítulo

La Biblia Textual 3a Edicion

Jesús le dice: ¿Porque me has visto, has creído? Bienaventurados los que no vieron y creyeron.

Ver Capítulo

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Dícele Jesús: '¿Porque me has visto has creído? ¡Bienaventurados los que creen sin haber visto!'.

Ver Capítulo

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Jesús le dijo: Tomás, porque me has visto, creíste; bienaventurados los que no vieron, y creyeron.

Ver Capítulo
Otras versiones



Juan 20:29
10 Referencias Cruzadas  

Pero dichosos los ojos de ustedes porque ven y sus oídos porque oyen.


¡Dichosa tú que has creído, porque lo que el Señor te ha dicho se cumplirá!».


―¡Señor mío y Dios mío! —dijo Tomás.


En ese momento entró también el otro discípulo, el que había llegado primero a la tumba. Y vio y creyó.


―Ustedes nunca van a creer si no ven señales milagrosas y maravillas —le dijo Jesús.


Vivimos creyendo que Dios nos dará ese nuevo cuerpo, aunque ahora no lo veamos.


Ahora bien, tener fe es estar seguro de recibir lo que se espera. Es tener la seguridad de que algo es real, aunque no se vea.


Por la fe Moisés salió de Egipto sin tenerle miedo al enojo del rey. Pues se mantuvo firme como si estuviera viendo al Dios invisible.


Dios habló bien de todos ellos, gracias a la fe. Sin embargo, ninguno de ellos vio el cumplimiento de la promesa.


Ustedes aman a Jesucristo a pesar de que no lo han visto. Aunque no lo ven ahora, creen en él y se alegran con un gozo tan grande y maravilloso que no se puede describir con palabras.