No está aquí, pues ha resucitado, tal como dijo. Vengan a ver el lugar donde estaba.
Hechos 13:30 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Pero Dios lo levantó de entre los muertos. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Mas Dios le levantó de los muertos. Biblia Nueva Traducción Viviente ¡Pero Dios lo levantó de los muertos! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Dios lo resucitó de entre los muertos. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Dios lo levantó de entre los muertos, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Dios lo resucitó de entre los muertos, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Dios le resucitó de los muertos. |
No está aquí, pues ha resucitado, tal como dijo. Vengan a ver el lugar donde estaba.
―Destruyan este templo —respondió Jesús—, y lo levantaré de nuevo en tres días.
pero Dios lo resucitó al tercer día. Luego decidió que Jesús se apareciera,
Y él ha cumplido esa promesa con nosotros, que somos sus descendientes. La cumplió al resucitar a Jesús. Como está escrito en el segundo salmo: »“Tú eres mi Hijo; hoy mismo me he convertido en tu Padre”.
Dios lo resucitó para que su cuerpo no se descompusiera en la tumba. Así se cumplieron estas palabras: »“Yo cumpliré sin falta las santas bendiciones que prometí a David”.
Él ha fijado un día en que juzgará al mundo con justicia, por medio del hombre que ha elegido. De ello ha dado pruebas a todos al levantarlo de entre los muertos».
Sin embargo, Dios lo resucitó, librándolo de las ataduras de la muerte. ¡Era imposible que la muerte lo mantuviera bajo su dominio!
El Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el Dios de nuestros antepasados, ha dado la gloria a su siervo Jesús. Ustedes lo entregaron y lo rechazaron ante Pilato, aunque este había decidido soltarlo.
Mataron al autor de la vida, pero Dios lo levantó de entre los muertos, y de eso nosotros somos testigos.
Cuando Dios resucitó a su siervo, lo envió primero a ustedes. Lo envió para darles la bendición de que cada uno se convierta de sus maldades».
Pues escuchen esto, todos ustedes y todo el pueblo de Israel: Este hombre está aquí delante de ustedes sano, gracias al nombre de Jesucristo de Nazaret. Ustedes lo crucificaron, pero Dios lo ha resucitado.
El Dios que da la paz levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, al gran Pastor de las ovejas. Por medio de su sangre, Dios estableció con nosotros un pacto eterno.