Algunos judíos intentaban expulsar espíritus malignos usando el nombre del Señor Jesús. Les decían a los espíritus: «¡En el nombre de Jesús, a quien Pablo predica, les ordeno que salgan!».
Gálatas 1:23 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Solo habían oído decir: «El que antes nos perseguía ahora predica la fe que quería destruir». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 solamente oían decir: Aquel que en otro tiempo nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba. Biblia Nueva Traducción Viviente Todo lo que sabían de mí era lo que la gente decía: «¡El que antes nos perseguía ahora predica la misma fe que trataba de destruir!». Biblia Católica (Latinoamericana) Tan sólo habían oído decir de mí: 'El que en otro tiempo nos perseguía, ahora anuncia la fe que trataba de destruir. La Biblia Textual 3a Edicion Sólo oían: Aquél que en un tiempo nos perseguía, ahora proclama la fe° que antes trataba de destruir.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tan sólo oían decir: 'El que en otro tiempo nos perseguía, ahora anuncia la fe que entonces quería destruir'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) solamente habían oído decir: Aquel que antes nos perseguía, ahora predica la fe que en otro tiempo asolaba. |
Algunos judíos intentaban expulsar espíritus malignos usando el nombre del Señor Jesús. Les decían a los espíritus: «¡En el nombre de Jesús, a quien Pablo predica, les ordeno que salgan!».
Y el mensaje de Dios llegaba a la gente, de modo que la cantidad de discípulos aumentaba considerablemente en Jerusalén. Incluso muchos de los sacerdotes aceptaban el mensaje.
Entonces Ananías respondió: ―Señor, he oído decir que ese hombre ha causado mucho daño a los que creen en ti en Jerusalén.
En seguida se dedicó a predicar en las sinagogas, afirmando que Jesús es el Hijo de Dios.
Todos los que le oían quedaban asombrados y preguntaban: «¿No es este el que en Jerusalén perseguía a muerte a los que invocan ese nombre? ¿Y no ha venido aquí para llevárselos presos y entregarlos a los jefes de los sacerdotes?».
Cuando llegó a Jerusalén, trataba de juntarse con los discípulos. Pero todos tenían miedo de él, porque no creían que de veras fuera discípulo.
Por lo tanto, siempre que tengamos la oportunidad, hagamos bien a todos, y en especial a los de la familia de la fe.