Carguen con mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy paciente y humilde de corazón. Así encontrarán descanso para su alma,
Filipenses 2:5 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Su manera de pensar debe ser como la de Cristo Jesús. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús, Biblia Nueva Traducción Viviente Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) Tengan unos con otros las mismas disposiciones que estuvieron en Cristo Jesús: La Biblia Textual 3a Edicion Considerad° entre vosotros lo que hubo también en Jesús el Mesías, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tened entre vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Haya, pues, en vosotros la misma mente que hubo también en Cristo Jesús; |
Carguen con mi yugo y aprendan de mí, pues yo soy paciente y humilde de corazón. Así encontrarán descanso para su alma,
Pues, ¿quién es más importante, el que está a la mesa o el que sirve? ¿No lo es el que está sentado a la mesa? Sin embargo, yo estoy entre ustedes como uno que sirve.
Me refiero a Jesús de Nazaret. Dios lo llenó de poder y del Espíritu Santo. Él anduvo haciendo el bien y sanando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
Con mi ejemplo les he mostrado que es necesario trabajar duro para ayudar a los necesitados. Recuerden las palabras del Señor Jesús: “Hay más gozo en dar que en recibir”».
Ahora bien, si tu hermano en la fe se angustia por causa de lo que comes, ya no te comportas con amor. No destruyas, por causa de la comida, al hermano por quien Cristo murió.
Pues ni siquiera Cristo buscó hacer solamente lo que le agradaba. Al contrario, las Escrituras dicen: «Sobre mí han recaído los insultos de los que te critican».
Le pido a Dios que les dé ánimo y fortaleza para que continúen viviendo juntos en armonía, siguiendo el ejemplo de Cristo Jesús.
Hagan como yo, que procuro agradar a todos en todo. No busco mi propio bien, sino el de los demás, para que sean salvos.
Amen a los demás así como Cristo nos amó y murió por nosotros. Su sacrificio fue para Dios como ofrenda de olor agradable.
Los saludan Pablo y Timoteo, servidores de Cristo Jesús. Esta carta va dirigida a todos los creyentes en Cristo Jesús que están en Filipos, junto con los líderes y diáconos.
Para esto fueron llamados, porque Cristo sufrió por ustedes, dándoles ejemplo para que sigan sus pasos.
Por tanto, ya que Cristo sufrió, yo espero que ustedes estén dispuestos a sufrir también. Porque el que ha sufrido ha terminado con el pecado.