Cuando cayó en cuenta de esto, fue a casa de María, la madre de Juan, apodado Marcos. Allí estaban muchas personas orando.
Filemón 1:24 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) También envían saludos Marcos, Aristarco, Demas y Lucas, mis compañeros de trabajo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Marcos, Aristarco, Demas y Lucas, mis colaboradores. Biblia Nueva Traducción Viviente También los saludan Marcos, Aristarco, Demas y Lucas, mis colaboradores. Biblia Católica (Latinoamericana) y también Marcos, Aristarco, Demás y Lucas, mis ayudantes. La Biblia Textual 3a Edicion y Marcos,° Aristarco,° Demas,° Lucas,° mis colaboradores. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Marcos, Aristarco, Demas y Lucas, que son colaboradores míos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Marcos, Aristarco, Demas, Lucas, mis colaboradores. |
Cuando cayó en cuenta de esto, fue a casa de María, la madre de Juan, apodado Marcos. Allí estaban muchas personas orando.
Cuando Bernabé y Saulo cumplieron su misión, regresaron de Jerusalén. Llevaron con ellos a Juan, llamado también Marcos.
Pablo y sus compañeros salieron de Pafos en barco y llegaron a Perge de Panfilia. Allí Juan se separó de ellos y regresó a Jerusalén.
En seguida toda la ciudad se alborotó. Todos fueron al teatro, y agarraron a Gayo y a Aristarco. Ellos eran de Macedonia y acompañaban a Pablo en su viaje.
Subimos a bordo de un barco del puerto de Adramitio, que estaba a punto de salir hacia los puertos de la provincia de Asia. Nos acompañaba Aristarco, un macedonio de Tesalónica, y con él comenzamos el viaje.
Tito, por otra parte, es mi compañero y ayudante entre ustedes. En cuanto a los otros dos hermanos en la fe, les digo que son enviados de las iglesias y son gente que honra a Cristo.
Ahora bien, creo que es necesario enviarles de vuelta a Epafrodito. Ustedes me enviaron a este hermano en la fe, colaborador y compañero de lucha, para atenderme en mis necesidades.
Y a ti, mi fiel compañero, te pido que ayudes a estas mujeres que han luchado a mi lado en el anuncio de la buena noticia. Han luchado junto con Clemente y los demás colaboradores míos, cuyos nombres están en el libro de la vida.
Aristarco, mi compañero de cárcel, les manda saludos, como también Marcos, el primo de Bernabé. En cuanto a Marcos, ustedes ya han recibido instrucciones; si va a visitarlos, recíbanlo bien.
Saludos de parte de los que aquí en Babilonia creen en Cristo y han sido elegidos como ustedes. También reciban saludos de Marcos, quien es como un hijo para mí.
Nosotros, por lo tanto, debemos brindarles hospitalidad, y así colaborar con ellos en la enseñanza de la verdad.