Él les respondió: ―A ustedes se les ha permitido conocer los secretos del reino de los cielos; pero a ellos, no.
Apocalipsis 2:17 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré del maná escondido. Además, le daré una piedrecita blanca. En ella está escrito un nombre nuevo que solo conoce el que lo recibe. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita escrito un nombre nuevo, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe. Biblia Nueva Traducción Viviente »Todo el que tenga oídos para oír debe escuchar al Espíritu y entender lo que él dice a las iglesias. A todos los que salgan vencedores, les daré del maná que ha sido escondido en el cielo. Y le daré a cada uno una piedra blanca, y en la piedra estará grabado un nombre nuevo que nadie comprende aparte de aquel que lo recibe. Biblia Católica (Latinoamericana) El que tenga oídos, oiga este mensaje del Espíritu a las Iglesias: 'Al vencedor le daré un maná misterioso. Le daré también una piedra blanca con un nombre nuevo grabado en ella que sólo conoce el que lo recibe. La Biblia Textual 3a Edicion El que tiene oído, oiga qué dice el Espíritu a las iglesias. Al que venza, le daré del maná escondido,° y le daré una piedrecita° blanca, y esculpido en la piedrecita un nombre nuevo que nadie conoce, sino el que lo recibe. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Quien tenga oídos, oiga lo que dice el Espíritu a las Iglesias. Al que venza, le daré el maná escondido y una piedrecita blanca sobre la que habrá escrito un nombre que nadie conoce sino el que lo recibe'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, daré a comer del maná escondido, y le daré una piedrecita blanca, y en la piedrecita un nombre nuevo escrito, el cual ninguno conoce sino aquel que lo recibe. |
Él les respondió: ―A ustedes se les ha permitido conocer los secretos del reino de los cielos; pero a ellos, no.
El que no tiene el Espíritu no acepta lo que el Espíritu de Dios revela, pues le parece una locura. No puede entenderlo, porque solo los que tienen el Espíritu lo entienden.
Pues la vida que antes llevaban ya ha muerto y Dios les ha dado una nueva vida por medio de Cristo.
Y cantaban un himno nuevo delante del trono y delante de los cuatro seres vivientes y de los líderes. Solo los ciento cuarenta y cuatro mil podían aprender aquel himno. Solo ellos, que habían sido salvados de la tierra, podían aprenderlo. ¡Nadie más podía aprender ese himno!
En su manto y sobre el muslo lleva escrito este nombre: Rey de reyes y Señor de señores.
El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El vencedor no sufrirá daño alguno de la segunda muerte, es decir, jamás será separado de Dios.
El que tenga oídos, que oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al vencedor le daré derecho a comer del árbol de la vida. Este árbol está en el paraíso de Dios.