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2 Corintios 2:7 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Más bien debieran perdonarlo y consolarlo para que no enferme por tanta tristeza.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

así que, al contrario, vosotros más bien debéis perdonarle y consolarle, para que no sea consumido de demasiada tristeza.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

No obstante, ahora es tiempo de perdonarlo y consolarlo; de otro modo, podría ser vencido por el desaliento.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Ahora es mejor que lo perdonen y le den ánimo, no sea que la pena sea más grande de lo que pueda soportar.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Así al contrario, que mucho más lo perdonéis y consoléis, para que el tal no sea abrumado por demasiada tristeza.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

así que, ahora, más bien tenéis que perdonarlo y animarlo, para que no se sienta abrumado por la excesiva tristeza.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

así que, al contrario, vosotros más bien debierais perdonarle y consolarle, para que el tal no sea consumido de demasiada tristeza.

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Otras versiones



2 Corintios 2:7
20 Referencias Cruzadas  

Cuando los cuerpos que se mueren y descomponen se transformen en cuerpos que no se descomponen y nunca mueren, entonces se cumplirá lo que dicen las Escrituras: «La muerte ha sido derrotada; de Dios es la victoria».


Ahora les ruego que de nuevo le muestren su amor hacia él.


Ahora vivimos en este cuerpo, suspirando y preocupados, pues no queremos que ese cuerpo sea destruido. Más bien quisiéramos que el cuerpo fuera cambiado por el nuevo. Así el cuerpo no tendría que morir, sino que le sería dada la vida eterna.


La tristeza que Dios causa produce el arrepentimiento que lleva a la salvación, por eso no hay que lamentar esa tristeza. Pero la tristeza que causa el mundo produce la muerte.


Más bien, sean buenos y compasivos unos con otros. Perdónense unos a otros, así como Dios los perdonó a ustedes por medio de Cristo.


En efecto, estuvo enfermo y al borde de la muerte. Pero Dios tuvo compasión de él, y no solo de él, sino también de mí, para no añadir tristeza a mi tristeza.


Ayúdense unos a otros, y perdonen a todo el que los ofenda. Así como el Señor los perdonó, perdonen también ustedes.


Hermanos en la fe, no queremos que ignoren lo que va a pasar con los que ya han muerto, para que no se pongan tristes como la gente que no tiene esperanza.


Hermanos en la fe, en el nombre del Señor Jesucristo les ordenamos que se aparten de todo hermano en la fe que esté viviendo como un vago. Pues estos no obedecen las enseñanzas que les hemos dado.