A uno le dio cinco mil monedas, a otro, dos mil y a otro, solo mil, a cada uno según su capacidad. Luego, se fue de viaje.
2 Corintios 10:13 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Por nuestra parte, no vamos a pensar de nosotros más de lo debido. Dios nos conoce y nos asignó una tarea, así que solo de eso nos sentiremos orgullosos. Y ustedes son parte de ese trabajo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Pero nosotros no nos gloriaremos desmedidamente, sino conforme a la regla que Dios nos ha dado por medida, para llegar también hasta vosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente Nosotros no nos jactaremos de cosas hechas fuera de nuestro campo de autoridad. Nos jactaremos solo de lo que haya sucedido dentro de los límites del trabajo que Dios nos ha dado, los cuales incluyen nuestro trabajo con ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) Nosotros, en cambio, no pasaremos la medida cuando defendamos nuestra autoridad, pues respetaremos la medida que nos fijó Dios --que todo lo mide bien- al hacernos llegar hasta ustedes. La Biblia Textual 3a Edicion Pero nosotros no nos gloriaremos desmesuradamente, sino según la medida del límite que Dios nos asignó para llegar aun hasta vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Nosotros no nos gloriamos más allá de toda medida sino que procedemos según la norma exacta que nos asignó Dios como medida, y que nos permitió llegar hasta vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Mas nosotros, no nos gloriaremos desmedidamente, sino conforme a la medida de la regla que Dios nos dio por medida, para llegar aun hasta vosotros. |
A uno le dio cinco mil monedas, a otro, dos mil y a otro, solo mil, a cada uno según su capacidad. Luego, se fue de viaje.
Pero pregunto: ¿Acaso no oyeron el mensaje? ¡Claro que sí! «Por toda la tierra se escuchó su voz, ¡su mensaje llega hasta el último rincón del mundo!».
Yo sé que no lo merezco, pero Dios me ha dado autoridad para decirles lo siguiente: Nadie piense que es mejor o superior a otro. Más bien piensen que lo que ustedes son, lo son gracias a la medida de fe que Dios les ha dado.
Aunque no lo merecíamos, Dios nos dio diferentes dones a todos. Si Dios te dio la capacidad de profetizar, hazlo con toda la fe que tengas.
En efecto, mi plan ha sido predicar el mensaje de la buena noticia de Cristo donde él no fuera conocido. Por eso, nunca fui a lugares donde otros ya habían hablado de Cristo.
Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte los dones a cada uno según él quiere.
Pero a cada uno de nosotros se nos ha dado diferentes habilidades para hacer cosas. Y ha sido Cristo quien ha repartido esos dones como él quiere.
Usen bien las muchas capacidades que Dios les ha dado. Por eso, cada uno ponga al servicio de los demás la capacidad que haya recibido.