Muchos cobradores de impuestos y pecadores se acercaban a Jesús para oírlo.
1 Pedro 4:18 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) «Si el que es bueno a duras penas se salva, ¿qué será del pecador que no cree en Dios?». Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y: Si el justo con dificultad se salva, ¿En dónde aparecerá el impío y el pecador? Biblia Nueva Traducción Viviente Además, «Si los justos a duras penas se salvan, ¿qué será de los pecadores que viven sin Dios?». Biblia Católica (Latinoamericana) Si el justo se salva a duras penas, ¿dónde se presentarán el pecador y el impío? La Biblia Textual 3a Edicion Y: Si el justo con dificultad se salva, ¿En dónde aparecerá el impío y el pecador?° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y si el justo a duras penas se salva, ¿dónde podrá presentarse el impío y pecador? Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y si el justo con dificultad es salvo; ¿en dónde aparecerá el impío y el pecador? |
Muchos cobradores de impuestos y pecadores se acercaban a Jesús para oírlo.
Porque, si esto se hace cuando el árbol está verde, ¿qué no sucederá cuando esté seco?».
Allí fortalecían a los discípulos y los animaban a seguir creyendo. Les decían: «Es necesario pasar por muchas dificultades para entrar en el reino de Dios».
y me dijo: “No tengas miedo, Pablo. Tienes que presentarte ante el césar. Dios te ha escuchado y ninguno de los que navegan contigo morirá”.
Entonces Pablo les dijo al capitán y a los soldados: «Si esos no se quedan en el barco, no podrán salvarse ustedes».
Desde el cielo, Dios nos hace ver que está muy enojado con la gente por su mala conducta y falta de justicia. Con maldad ocultan la verdad de quién es Dios.
A la verdad, como no podíamos salvarnos, en el tiempo señalado Cristo murió por los malvados.
Sin embargo, Dios demuestra su amor por nosotros, pues, cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.
Por lo tanto, si alguien piensa que está firme y no va a pecar, tenga cuidado, pues podría caer.
Tengamos en cuenta que la Ley no se ha dado para los justos, sino para los desobedientes y rebeldes. Es para los pecadores y los que no creen en Dios. Se aplica a los que no respetan a Dios ni nuestras creencias. La Ley es para los que matan a sus propios padres. Es para los asesinos,
La promesa de gozar de su descanso todavía permanece. Pero debemos tener cuidado, pues alguno de ustedes podría quedarse sin disfrutarlo.
Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
Pero, de la misma manera, con una sola orden suya, el cielo y la tierra que ahora existen serán destruidos por el fuego. Ese día del juicio también serán destruidos los malvados.
para juzgar a todos. Reprenderá a todos los malvados pecadores por todas las malas acciones que han cometido. También los castigará por todos los insultos que han lanzado contra él».