»Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.
1 Juan 4:10 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros. Por eso envió a su Hijo. Lo envió para que fuera ofrecido como sacrificio por el perdón de nuestros pecados. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. Biblia Nueva Traducción Viviente En esto consiste el amor verdadero: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo como sacrificio para quitar nuestros pecados. Biblia Católica (Latinoamericana) En esto está el amor: no es que nosotros hayamos amado a Dios, sino que él nos amó primero y envió a su Hijo como víctima por nuestros pecados. La Biblia Textual 3a Edicion En esto está° el amor: No en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó y envió a su Hijo como propiciación° por nuestros pecados. Biblia Serafín de Ausejo 1975 En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo como sacrificio de purificación por nuestros pecados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En esto consiste el amor; no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino que Él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados. |
»Este mandamiento nuevo les doy: que se amen los unos a los otros. Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.
No me eligieron ustedes a mí, sino que yo los elegí a ustedes. Y les encargué que vayan y den mucho fruto, un fruto que permanezca. Así el Padre les dará todo lo que le pidan en mi nombre.
»Pues tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo único, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna.
Yo soy el pan vivo que bajó del cielo. Si alguno come de este pan, vivirá para siempre. Este pan es mi carne, que daré para que el mundo viva.
Por eso era necesario que en todo se pareciera a ellos. Lo hizo para ser un sumo sacerdote fiel y lleno de amor al servicio de Dios. De este modo pudo ofrecer un sacrificio para el perdón de los pecados del pueblo.
Cristo aceptó como suyos nuestros pecados, y así fue a morir en la cruz. Lo hizo para que dejáramos de pecar y viviéramos para hacer el bien. Él fue herido como castigo, para que ustedes fueran sanados.
Porque Cristo murió para perdonar nuestros pecados una sola vez, y es suficiente. Él, que era justo, murió por nosotros, que éramos injustos. Así nos acercó a Dios. Él sufrió la muerte en su cuerpo, pero el Espíritu hizo que volviera a la vida.
Él murió en la cruz ofreciendo su vida como un sacrificio, para que Dios perdonara nuestros pecados. Pero no solo para que nos perdonara a nosotros, sino a todo el mundo.
¡Miren cuánto amor nos tiene el Padre! Por eso somos llamados hijos de Dios. ¡Y de verdad lo somos! Pero los pecadores de este mundo no nos conocen, porque no conocen al Padre.
Y lo que Dios ha dicho es esto: que él nos ha dado vida eterna, y esa vida es para los que creen en su Hijo.