Al ver una higuera junto al camino, se acercó a ella, pero no encontró nada más que hojas. ―¡Nunca más vuelvas a dar fruto! —le dijo. Y al instante se secó la higuera.
1 Corintios 6:10 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ni los ladrones, ni los que siempre quieren tener más de lo que tienen. De la misma manera, ni los borrachos, ni los que insultan a los demás ni los tramposos formarán parte del reino de Dios. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente o son ladrones o avaros o borrachos o insultan o estafan a la gente: ninguno de esos heredará el reino de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) ni los ladrones, ni los que no tienen nunca bastante, ni los borrachos, ni los chismosos, ni los que se aprovechan de los demás heredarán el Reino de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 ni ladrones, ni avaros, ni borrachos, ni calumniadores, ni salteadores heredarán el reino de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores, heredarán el reino de Dios. |
Al ver una higuera junto al camino, se acercó a ella, pero no encontró nada más que hojas. ―¡Nunca más vuelvas a dar fruto! —le dijo. Y al instante se secó la higuera.
»¡Ay de ustedes, maestros de la Ley y fariseos, hipócritas! Les cierran a los demás el reino de los cielos, y ni entran ustedes ni dejan entrar a los que intentan hacerlo.
»¡Serpientes! ¡Nido de víboras! ¿Cómo escaparán ustedes de la condenación del infierno?
Dijo esto no porque se interesara por los pobres, sino porque era un ladrón. Como tenía a su cargo la bolsa del dinero, acostumbraba robarse lo que echaban en ella.
»Ahora le pido a Dios que cuide de todos ustedes, y ruego que ustedes sigan confiando en el mensaje de su inmerecido amor. Ese mensaje de amor tiene poder para ayudarlos a crecer espiritualmente. Y, si lo aceptan, recibirán las promesas hechas a su pueblo santo.
Les digo, hermanos en la fe, que el cuerpo material no puede formar parte del reino de Dios. El cuerpo que se descompone al morir no puede ser parte de un reino que vive para siempre.
Lo que digo es que no deben relacionarse con personas que dicen ser hermanos en la fe, pero tienen relaciones sexuales prohibidas. Dicen ser creyentes, pero son avaros, idólatras, insultan, son borrachos o ladrones. Con tales personas ni siquiera deben juntarse para comer.
Tienen envidia, se emborrachan, participan de fiestas con sexo y otras cosas parecidas. Lo vuelvo a decir, los que practican tales cosas no tendrán parte en el reino de Dios.
El que robaba, que no robe más, sino que trabaje honradamente con las manos, así tendrá suficiente para compartir con los necesitados.
Pues pueden estar seguros de que si tienen relaciones sexuales prohibidas o hacen cosas vergonzosas jamás formarán parte del reino de Cristo y de Dios. Tampoco lo serán aquellos que siempre están preocupados por tener más y más. Los que así se comportan adoran a un dios falso.
Que nadie le cause mal a su hermano en la fe ni se aproveche de él en este asunto. El Señor castiga todo esto, como ya les hemos dicho y advertido.
Que ninguno tenga que sufrir por asesino, ladrón o delincuente, ni siquiera por entrometido.