Ahora bien, algunos de ustedes se han vuelto muy orgullosos, pues piensan que no iré a verlos.
1 Corintios 4:21 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) ¿Qué prefieren? ¿Que vaya a verlos con un látigo, o con amor y amabilidad? Más versionesBiblia Reina Valera 1960 ¿Qué queréis? ¿Iré a vosotros con vara, o con amor y espíritu de mansedumbre? Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Qué prefieren? ¿Que llegue con una vara para castigarlos o que vaya con amor y un espíritu amable? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Qué prefieren?, ¿que vaya con un palo o con amor y amabilidad? La Biblia Textual 3a Edicion ¿Qué queréis? ¿Iré a vosotros con vara; o en amor y con espíritu de mansedumbre? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿Qué queréis: que vaya yo a vosotros vara en mano, o con amor y espíritu de mansedumbre? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Qué queréis? ¿Iré a vosotros con vara, o con amor y espíritu de mansedumbre? |
Ahora bien, algunos de ustedes se han vuelto muy orgullosos, pues piensan que no iré a verlos.
entreguen a este hombre a Satanás para que su cuerpo sea destruido. De esta manera su espíritu se salvará en el día que el Señor regrese.
Todavía no he ido a Corinto porque no quiero ser tan duro con ustedes. Pongo a Dios por testigo de que así es. Que Dios me quite la vida si miento.
Estamos dispuestos a castigar cualquier acto de desobediencia. Y lo haremos hasta contar con la completa obediencia de ustedes.
No siento vergüenza al decir con orgullo que el Señor nos ha dado autoridad. Pues esa autoridad es para ayudarlos a tener una fe más fuerte, no para destruirla.
Le rogué a Tito que fuera a verlos y con él envié al otro hermano en la fe. ¿Acaso se aprovechó Tito de ustedes? ¿No nos comportamos los dos de la misma manera? ¿No sentimos lo mismo por ustedes?
Por eso les escribo todo esto en mi ausencia, para que cuando vaya no tenga que ser estricto en el uso de mi autoridad. El Señor me ha dado esa autoridad para fortalecer su fe, no para destruirla.
Cuando estuve con ustedes por segunda vez les advertí, y aunque ahora estoy ausente se lo repito: Cuando vuelva a verlos, seré muy duro con los que antes o después hayan pecado.
Les escribí como lo hice para que no me causaran tristeza los que debían alegrarme cuando fuera a verlos. Estaba seguro de que todos ustedes se pondrían alegres por mí.
En efecto, lo que fue glorioso ya no lo es si se le compara con esta extraordinaria gloria.
Hermanos en la fe, si sorprenden a alguien pecando, ustedes que son espirituales deben corregirlo con una actitud humilde. Pero tengan cuidado, porque ustedes también pueden ser tentados a pecar.
Aunque como apóstoles de Cristo hubiéramos podido ser exigentes con ustedes, los tratamos con delicadeza. Los tratamos como una madre que alimenta a su bebé y cuida a sus hijos.
En cambio, la sabiduría que Dios da es ante todo pura, es decir, no produce maldad. Al contrario, produce paz, bondad, amabilidad, compasión y buenas acciones. El que tiene sabiduría de Dios trata a todos por igual y es sincero.