»Por envidia, esos hijos de Jacob vendieron a su hermano José como esclavo, quien fue llevado a Egipto; pero Dios estaba con él
1 Corintios 13:4 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) El que ama es paciente, es bondadoso. El que ama no es envidioso ni orgulloso ni se cree más que nadie. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; Biblia Nueva Traducción Viviente El amor es paciente y bondadoso. El amor no es celoso ni fanfarrón ni orgulloso Biblia Católica (Latinoamericana) El amor es paciente y muestra comprensión. El amor no tiene celos, no aparenta ni se infla. La Biblia Textual 3a Edicion El amor es sufrido, el amor es bondadoso, el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece, Biblia Serafín de Ausejo 1975 El amor es paciente, el amor es benigno; no tiene envidia; no presume ni se engríe; Biblia Reina Valera Gómez (2023) La caridad es sufrida, es benigna; La caridad no tiene envidia, la caridad no es jactanciosa, no se envanece; |
»Por envidia, esos hijos de Jacob vendieron a su hermano José como esclavo, quien fue llevado a Egipto; pero Dios estaba con él
Han cometido toda clase de injusticia, maldad, avaricia y actos vergonzosos. Están llenos de envidia, homicidios, divisiones, engaño y maldad. Son chismosos,
Vivan honestamente, como a la luz del día, es decir, sin nada que ocultar. No participen en orgías ni se emborrachen. No tengan relaciones sexuales prohibidas, no armen pelea ni tengan envidia.
pues, espiritualmente, todavía son como niños. Mientras haya entre ustedes celos y pleitos, ¿no se comportan como niños espirituales? Pues se están comportando como la gente del mundo.
Ahora bien, algunos de ustedes se han vuelto muy orgullosos, pues piensan que no iré a verlos.
Hermanos en la fe, he hablado de Apolos y de mí mismo para que ustedes me entiendan mejor. Si siguen nuestro ejemplo, aprenderán aquello de «no ir más allá de lo que dicen las Escrituras». Así ninguno de ustedes podrá sentirse orgulloso afirmando que uno es mejor que el otro.
¡Y ustedes se sienten orgullosos de esto! Más bien deberían sentirse tristes y echar fuera a ese hombre.
En cuanto a los alimentos sacrificados a los ídolos, es cierto que todos tenemos conocimiento acerca de esto. Pero recuerden que el conocimiento llena de orgullo, mientras que el amor nos hace cristianos firmes en la fe.
En realidad, tengo miedo de ir a verlos y que no los encuentre como quisiera, y que ustedes no me encuentren a mí como quisieran. Tengo miedo de encontrarlos peleando, con celos, enojados unos con otros, siendo egoístas, mentirosos, orgullosos y causando alborotos.
También lo demostramos por nuestra buena conducta, nuestro conocimiento, nuestra paciencia y bondad. Además, el Espíritu Santo está en nosotros y nuestro amor es sincero.
No dejemos que el orgullo nos domine provocando peleas y envidias entre nosotros.
Sean siempre humildes y amables, tengan paciencia, ayúdense unos a otros con amor.
Más bien, sean buenos y compasivos unos con otros. Perdónense unos a otros, así como Dios los perdonó a ustedes por medio de Cristo.
Es cierto que algunos predican a Cristo por envidia y rivalidad, pero otros lo hacen con buenas intenciones.
Dios, con su glorioso poder, les dará fuerzas para que puedan seguir creyendo y soportando toda dificultad.
No se dejen criticar de esos que mienten diciendo que son humildes y adoran ángeles. Dicen que tienen visiones, pero no es verdad. Se sienten orgullosos de su malvada manera de pensar.
Por lo tanto, ya que Dios los eligió para ser parte de su pueblo santo y amado, sean buenos con los demás. Muestren amor, humildad, amabilidad y paciencia.
Hermanos en la fe, también les rogamos que llamen la atención a los perezosos, denles ánimo a los desanimados, ayuden a los débiles y sean pacientes con todos.
es un terco que nada entiende. Es una persona a la que solo le gusta provocar discusiones inútiles. Le gusta provocar envidias, desacuerdos, insultos, desconfianzas
Cuando tengas que corregir a tus enemigos, hazlo con humildad, con la esperanza de que Dios les permita arrepentirse y así conozcan la verdad.
Tú, en cambio, has seguido paso a paso mis enseñanzas, mi manera de vivir, mi propósito y mi fe. Sabes de la paciencia que he tenido, del amor que tengo por los demás y de cómo soporto las dificultades.
Predica el mensaje de Dios, nunca dejes de hacerlo, aunque no parezca ser el mejor momento. Corrige, reprende y anima con mucha paciencia a todos, sin dejar de enseñar.
En otro tiempo también nosotros éramos tontos y desobedientes. Fuimos engañados y nos hicimos esclavos de toda clase de malos deseos y placeres. Vivíamos haciendo el mal y llenos de envidia. Éramos gente odiosa y nos odiábamos unos a otros.
¿O creen que la Escritura se equivoca cuando dice que Dios ama celosamente al espíritu que hizo habitar en nosotros?
Por lo tanto, abandonen toda maldad y todo engaño, hipocresía y envidia. No digan mentiras acerca de otra persona.
En fin, vivan en armonía los unos con los otros. Compartan penas y alegrías, amen a sus hermanos en la fe, sean compasivos y humildes.
Sobre todo, ámense los unos a los otros profundamente, porque el amor perdona gran cantidad de pecados.
A esa entrega, agreguen afecto por los hermanos en la fe, y a eso agreguen el amor.
Queridos hermanos en la fe, no hay duda de que Dios nos ha amado mucho. Por eso, también nosotros debemos amarnos los unos a los otros.