»¡Ay del mundo por las invitaciones al pecado! Esas invitaciones son inevitables, pero ¡ay de quienes las ocasionan!
1 Corintios 11:19 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Sin duda, estas divisiones se dan entre ustedes para que así se demuestre quiénes en verdad cuentan con la aprobación de Dios. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Porque es preciso que entre vosotros haya disensiones, para que se hagan manifiestos entre vosotros los que son aprobados. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que, ¡por supuesto que tiene que haber divisiones entre ustedes, para que los que tienen la aprobación de Dios sean reconocidos! Biblia Católica (Latinoamericana) Incluso tendrá que haber partidos, para que así se vea con claridad con quién se puede contar. La Biblia Textual 3a Edicion Porque también debe haber divisiones entre vosotros, para que los aprobados se hagan manifiestos entre vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 La verdad es que conviene que haya escisiones para que así se descubra quiénes de entre vosotros son de probada virtud. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque es necesario que también entre vosotros haya herejías, para que los que son aprobados se manifiesten entre vosotros. |
»¡Ay del mundo por las invitaciones al pecado! Esas invitaciones son inevitables, pero ¡ay de quienes las ocasionan!
Luego dijo Jesús a sus discípulos: ―Es imposible evitar que haya gente que invite a otros a pecar. Pero ¡ay de aquel que hace pecar a los demás!
para que se manifiesten las intenciones de muchos corazones. En cuanto a ti, una espada te atravesará el alma».
Entonces algunos creyentes que pertenecían al grupo de los fariseos se pusieron de pie y dijeron: ―Es necesario circuncidar a los no judíos y exigirles que obedezcan la Ley de Moisés.
Aun de entre ustedes mismos se levantarán algunos que enseñarán falsedades para arrastrar a los discípulos que los sigan.
Sin embargo, sí confieso que adoro al Dios de nuestros antepasados. Lo adoro junto con el grupo de los que han aceptado el mensaje de Jesús. Y lo he aceptado porque estoy de acuerdo con todo lo que enseña la Ley. También creo lo que está escrito en el libro de los Profetas. A este grupo mis acusadores lo llaman secta.
Hemos descubierto que este hombre es un verdadero problema. Por todas partes anda provocando alborotos entre los judíos. Es el líder de un grupo llamado los nazarenos.
Ellos me conocen desde hace mucho tiempo. Así que pueden decir aquí, si quieren, que viví como fariseo. Los fariseos son el grupo más estricto de nuestra religión.
Pero queremos oír tu punto de vista, porque lo único que sabemos es que en todas partes se habla en contra de ese grupo.
El sumo sacerdote y todos sus seguidores, que pertenecían al grupo de los saduceos, se llenaron de envidia.
En realidad, tengo miedo de ir a verlos y que no los encuentre como quisiera, y que ustedes no me encuentren a mí como quisieran. Tengo miedo de encontrarlos peleando, con celos, enojados unos con otros, siendo egoístas, mentirosos, orgullosos y causando alborotos.
Adoran ídolos y practican brujería. Sienten odio, arman pelea, son celosos y se enojan fácilmente. Siembran enemistades, se oponen a todo y causan divisiones.
Al que cause divisiones, repréndelo dos veces y, si no hace caso, aléjate de esa persona.
Aunque esos enemigos salieron de entre nosotros, en realidad no eran de los nuestros; si lo hubieran sido, se habrían quedado con nosotros. Su salida sirvió para comprobar que ninguno de ellos era de los nuestros.